¿Qué es el Zakat y por qué se estableció?
El Zakat es uno de los cinco pilares del Islam, un deber fundamental para todo musulmán que cumpla los requisitos. Es un acto obligatorio de adoración diseñado para purificar la riqueza y ayudar a los necesitados. Pero, ¿se puede dar el Zakat a los musulmanes de otros países? Por supuesto. Exploremos por qué el Zakat es universal y por qué las fronteras no limitan su impacto.
El Zakat es una forma de caridad que purifica la riqueza, redistribuye los recursos económicos y eleva a los menos afortunados. No es simplemente un acto de bondad sino una obligación divina ordenada por Alá. El Corán dice:
«¡Deduce de sus bienes una limosna para limpiarles y purificarles con ella! ¡Y ora por ellos! Tu oración les sosiega. Alá todo lo oye, todo lo sabe». (Sura At-Tawbah 9:103)
El Zakat tiene como objetivo eliminar la pobreza, fortalecer los lazos sociales y garantizar que la riqueza circule dentro de la Ummah musulmana. Es un sistema que trasciende las fronteras políticas y las barreras económicas.
¿Importan las fronteras al dar el Zakat?
Las fronteras y los nombres de los países existen en el mundo actual, pero han cambiado varias veces a lo largo de la historia. Sin embargo, la esencia del Islam sigue siendo la misma. El Islam nos une como una sola Ummah, donde todos los musulmanes están interconectados por la fe y la Ukhuwwah (hermandad).
Allah nos recuerda:
«Los creyentes son, en verdad, hermanos. ¡Reconciliad, pues, a vuestos hermanos y temed a Alá! Quizás, así, se os tenga piedad«. (Sura Al-Hujurat 49:10)
Esto significa que la responsabilidad de un musulmán no se detiene en su frontera nacional. Si un musulmán está sufriendo en otro país, tenemos el deber de ayudarlo, ya sea que esté en Palestina, África o cualquier otro lugar del mundo.
¿Se puede enviar el Zakat a los musulmanes de otros países?
Sí, se puede. Si eres musulmán en Inglaterra, Francia o Alemania, puedes enviar tu Zakat a los niños huérfanos de Palestina, una región desgarrada por la guerra, o a familias en dificultades en África. Si estás en la India, los Emiratos o Kuwait, puedes dar tu Zakat para ayudar a los musulmanes necesitados, independientemente de dónde se encuentren.
La jurisprudencia islámica (Fiqh) permite que el Zakat se distribuya dondequiera que haya necesidad, en particular cuando los musulmanes locales tienen recursos suficientes mientras otros en otros lugares sufren. El Profeta Muhammad (la paz sea con él) enfatizó la importancia de ayudar a los demás musulmanes, independientemente de la distancia.
«Los creyentes, en su mutua bondad, compasión y simpatía, son como un solo cuerpo. Cuando uno de los miembros sufre, todo el cuerpo responde con vigilia y fiebre». (Sahih al-Bukhari y Sahih Muslim)
Si los musulmanes de una región en particular tienen un exceso de Zakat mientras que otros están en extrema necesidad, no solo es permisible sino necesario enviar ayuda donde más se necesita.
Cómo las criptomonedas facilitan la entrega del Zakat
En la era digital actual, las criptomonedas proporcionan una forma eficiente de enviar el Zakat a través de las fronteras. Permite a los musulmanes ayudar a los necesitados en tiempo real, lo que garantiza que los fondos lleguen a los más vulnerables de manera rápida y segura. Al aprovechar la tecnología blockchain, podemos distribuir el Zakat a niños huérfanos, familias palestinas desplazadas y musulmanes en dificultades en África sin demoras ni tarifas excesivas.
Algunos musulmanes prefieren calcular su Zakat manualmente para garantizar la precisión en el cumplimiento de su obligación. Si ya ha determinado el monto adeudado, puede pagar su Zakat instantáneamente a través de este enlace.
Otros, reconociendo las inmensas bendiciones del Ramadán, optan por donar su Zakat específicamente durante este mes sagrado para ayudar a los necesitados. Si desea donar su Zakat para el Ramadán, puede hacerlo aquí y ayudar a brindar alivio a los menos afortunados durante este tiempo bendito.
¿Puedo ayudar a otros países de forma anónima?
Sí. Por supuesto, nos complace mucho que los donantes introduzcan su información personal, como su dirección de correo electrónico, para que podamos enviarles la confirmación de su depósito y también informes de las obras de caridad realizadas. Por otro lado, tenemos una estricta política de privacidad de la información personal y la información de las personas se guarda en confianza con nosotros y no la proporcionamos a otros, pero aun así, algunos donantes están interesados en proteger completamente su información personal y ayudar de forma anónima. Respetamos a esta categoría de donantes y pueden pagar el Zakat de forma completamente anónima o dar su Zakat a los necesitados de otros países.
El Islam no ve fronteras, tampoco debería hacerlo nuestra caridad
En el Islam, la nacionalidad, la raza y el color no determinan el valor de una persona. El Profeta (la paz sea con él) dijo:
«No hay superioridad de un árabe sobre un no árabe, ni de un no árabe sobre un árabe; ni el blanco es superior al negro ni el negro es superior al blanco, excepto por la piedad y las buenas acciones». (Musnad Ahmad)
El concepto de Ukhuwwah nos enseña que todos los musulmanes son una familia. Si tu hermano o hermana está en necesidad, no dudes en ayudarlos simplemente porque viven en otro país.
Consideraciones finales
Sí, puedes y debes dar el Zakat a los musulmanes de otros países. El Islam promueve la unidad y la ayuda mutua, y en tiempos difíciles, nuestro Zakat debe ir a donde más se necesita. Ya sea que estés en Europa, Oriente Medio o Asia, tu Zakat puede mejorar vidas, apoyar a familias y fortalecer nuestra Ummah.
Con la tecnología actual, donar el Zakat nunca ha sido tan fácil. A través de criptomonedas y otros medios digitales, puedes asegurarte de que tu Zakat llegue a los más merecedores, independientemente de la geografía. Cumplamos con nuestro deber, fortalezcamos nuestro vínculo de Ukhuwwah y apoyemos a nuestros hermanos y hermanas necesitados, donde sea que se encuentren.
Kaffara, Fidyah y el Zakat al-Fitr para el Ramadán: pago de las obligaciones islámicas (Wajib)
El Ramadán es un momento de reflexión espiritual, autodisciplina y generosidad. Sin embargo, para aquellos que no pueden ayunar por razones válidas o aquellos que han roto intencionalmente su ayuno, la ley islámica exige pagos compensatorios específicos como la Kaffara, la Fidyah y el Zakat al-Fitr. Comprender cómo se calculan estos montos es esencial para garantizar que nuestras obligaciones se alineen con las enseñanzas islámicas.
Como organización benéfica islámica, en Our Islamic Charity seguimos estrictamente las leyes islámicas y consultamos con eruditos e imanes para determinar los valores apropiados para estas obligaciones. Nuestros cálculos se basan en los precios promedio en varias regiones, incluido Medio Oriente, África y Europa, como el Reino Unido, Alemania y Francia. Permítanos guiarlo a través del proceso de cálculo de estos pagos esenciales.
Kaffara por romper el ayuno intencionalmente
Kaffara (expiación) se aplica a quienes rompen deliberadamente un ayuno durante el Ramadán sin una razón válida. La ley islámica exige ayunar durante sesenta días consecutivos o alimentar a sesenta personas necesitadas por cada día que se rompió el ayuno. Si uno no puede ayunar por razones de salud u otras razones legítimas, la alternativa es proporcionar comida a los pobres.
Cómo calcular la Kaffara:
- Ayuno: si puede ayunar, debe ayunar durante 60 días consecutivos por cada ayuno que no haya realizado.
- Alimentación a los pobres: si no puede ayunar, debe alimentar a 60 personas pobres por cada ayuno que no haya realizado.
El costo se determina según el precio de una comida estándar en su región.
Calculamos el precio promedio de las comidas en Medio Oriente, África y Europa y lo ajustamos en consecuencia. Por ejemplo, si una comida cuesta $4, la Kaffara total por ayuno no realizado es $240. Hemos calculado esta cantidad de pago de Kaffara y puede verla desde aquí o pagar su Kaffara.
Fidyah para quienes no pueden ayunar
La fidyah se aplica a quienes no pueden ayunar debido a una enfermedad crónica, la vejez u otras condiciones permanentes. A diferencia de la kaffara, la fidyah es una compensación simple por los ayunos perdidos.
Cómo calcular la fidyah:
- Una comida por ayuno: debes proporcionar una comida a una persona necesitada por cada ayuno perdido.
- Equivalente monetario: el costo de una comida varía según la ubicación. En promedio:
- En los países de Medio Oriente y África, una comida cuesta entre $2 y $5.
- En países europeos como el Reino Unido, Alemania y Francia, una comida puede costar entre $5 y $10.
Si una comida cuesta $6, la fidyah total por 30 ayunos perdidos sería de $180. Hemos calculado esta cantidad de pago de fidyah y puedes verla desde aquí o pagar tu fidyah.
Zakat al-Fitr: la caridad obligatoria antes del Eid
Zakat al-Fitr es una caridad obligatoria que debe entregarse antes del Eid al-Fitr. Esto garantiza que los pobres también puedan celebrar la festividad y que los ayunos del dador se purifiquen de cualquier defecto.
Cómo calcular el Zakat al-Fitr:
- Requisito básico: es igual al valor de aproximadamente un Sa’a (unos 3 kg o 4,25 litros) de alimentos básicos como trigo, cebada, dátiles o arroz.
- Equivalente monetario: el precio varía según el país y los precios de los alimentos básicos. En promedio:
- Oriente Medio y África: $3 – $10 por persona
- Europa (Reino Unido, Alemania, Francia): $7 – $15 por persona
- Para una familia: si una familia de cinco debe pagar y la tasa de Zakat al-Fitr es de $10 por persona, el pago total sería de $50.
Por último, si lo deseas, calcula tú mismo el precio regional. Puede pagar el monto calculado por usted mismo a través del pago «Otro monto».
Garantizamos la precisión y el cumplimiento de la ley islámica
En Our Islamic Charity, actualizamos continuamente nuestros cálculos en función de los precios actuales para garantizar que nuestros donantes cumplan con sus obligaciones con precisión. Seguimos las opiniones académicas y las fatwas, lo que garantiza que nuestros montos recomendados se ajusten a la ley islámica.
Al donar a través de nosotros, se asegura de que sus contribuciones lleguen a los necesitados de manera eficiente y de acuerdo con las enseñanzas islámicas. Ya sea que pague Kaffara, Fidyah o Zakat al-Fitr, facilitamos el proceso con precios regionales precisos para que sus donaciones tengan impacto.
Que Allah acepte nuestros ayunos, nuestra adoración y nuestra caridad. Que Él los bendiga, nuestros queridos donantes, por su generosidad y compromiso de apoyar a los necesitados. Amén.
Entendiendo el mandato divino: interpretación de los versículos 183 y 184 de la Sura Al-Baqarah
El Corán, como revelación final, sirve como una guía integral para nuestra vida espiritual y práctica. En sus versículos sagrados, Alá ordena, instruye y guía a los creyentes hacia la rectitud y la autodisciplina. Entre estas ordenanzas divinas, el ayuno ocupa un lugar central en el Islam. En la Sura Al-Baqarah, los versículos 183 y 184 iluminan el significado del ayuno, su propósito y la sabiduría divina detrás de él.
El mandato divino de ayunar: un legado de rectitud
«¡Creyentes!; Se os ha prescrito el ayuno, al igual que se prescribió a los que os precedieron. Quizás, así, temáis a Alá». (Al-Baqarah 2:183)
Este versículo establece el ayuno (Sawm) como una obligación, no sólo para la Ummah del Profeta Muhammad (la paz sea con él), sino para las naciones que lo precedieron. Destaca la naturaleza universal del ayuno en todas las tradiciones divinas, enfatizando su papel en el desarrollo de la Taqwa (conciencia de Dios).
El núcleo del ayuno no es la mera abstinencia física de comida, bebida y deseos, sino un ejercicio de refinamiento espiritual. Enseña paciencia, autocontrol y gratitud, elevando la conciencia del creyente sobre Alá. El objetivo final es purificar el alma, fomentando la sinceridad en la adoración y la conciencia de la presencia divina.
La misericordia en la obligación: consideración por las dificultades
«Días contados. Y quien de vosotros esté enfermo o de viaje, un número igual de días. Y los que, pudiendo, no ayunen podrán redimirse dando de comer a un pobre. Y, si uno hace el bien espontáneamente, tanto mejor para él. Pero os conviene más ayunar. Si supierais.» (Al-Baqarah 2:184)
Este versículo demuestra el equilibrio entre la obligación y la misericordia en el Islam. Dios reconoce las diversas condiciones de las personas y otorga concesiones a quienes enfrentan dificultades legítimas.
- Los enfermos y los viajeros: se les permite retrasar sus ayunos y compensarlos más tarde cuando sus circunstancias lo permitan.
- Aquellos que enfrentan dificultades extremas: las personas que no pueden ayunar debido a una enfermedad crónica o fragilidad pueden ofrecer Fidya (rescate), que implica alimentar a una persona necesitada por cada ayuno perdido. Lea más sobre la fidya (rescate) y cómo pagarla.
- El estímulo para ayunar: A pesar de estas concesiones, Alá enfatiza que el ayuno es inherentemente mejor, reforzando sus beneficios espirituales y físicos.
El concepto de fidya muestra la compasión del Islam, asegurando que ningún creyente sea agobiado más allá de su capacidad. Esta disposición defiende el principio de la facilidad en la ley islámica, una característica fundamental de la legislación divina.
La conexión entre el ayuno, la caridad y la taqwa
Estos versículos entrelazan el ayuno con la caridad y la rectitud. El Corán nos recuerda repetidamente que los actos de adoración van más allá de la devoción personal: deben manifestarse en la responsabilidad social. Al alentar la fidya y la caridad voluntaria, Alá alimenta un espíritu de generosidad, asegurando que los menos afortunados se beneficien de la riqueza de los demás.
Además, el ayuno en sí mismo cultiva un profundo sentido de empatía por los necesitados. Privarnos de comida y bebida, incluso por un período limitado, nos permite comprender las luchas de los menos privilegiados. Esta mayor conciencia fomenta una actitud caritativa, inspirando a los creyentes a contribuir generosamente, ya sea a través de la fidya, el zakat o la sadaqah. Puede leer nuestros programas de caridad para el Ramadán de 2025.
El vínculo entre estos versículos y otros mandamientos relacionados con el ayuno
El Corán proporciona un marco integral para el ayuno en los versículos siguientes:
- El versículo 185 de la Sura Al-Baqarah profundiza en el significado del Ramadán, revelando que el Corán fue enviado en este mes bendito y reafirmando las pautas del ayuno.
- El versículo 187 de la Sura Al-Baqarah aclara las acciones permitidas durante la noche de ayuno, enfatizando el equilibrio entre la dedicación espiritual y las necesidades humanas.
- La Sura Al-Ma’idah (5:89) analiza la expiación (Kaffarah) por romper un juramento, que también implica el ayuno como medio de expiación.
Este enfoque estructurado garantiza que el ayuno no sea solo un ritual sino un viaje transformador, que enriquece nuestra fe y carácter.
La sabiduría detrás del ayuno y la fidya: un camino hacia la elevación espiritual
El ayuno no consiste solamente en abstenerse de comer y beber, sino en refinar el ser interior. El Profeta Muhammad (la paz sea con él) enfatizó que el ayuno es un escudo contra el pecado, una oportunidad para la purificación y un camino para ganarse la complacencia de Allah.
La fidya, por otro lado, defiende el principio de inclusión en el culto. Aquellos que no pueden ayunar no están excluidos de las recompensas espirituales del Ramadán. Al alimentar a los necesitados, aún participan de las bendiciones del mes sagrado, lo que refuerza la interconexión de la Ummah.
Un regalo divino de misericordia y disciplina
Los versículos de la Sura Al-Baqarah (2:183-184) encapsulan la sabiduría del ayuno como un medio para alcanzar la rectitud y la cercanía divina. También reflejan la misericordia inherente del Islam al acomodarse a quienes tienen dificultades con el ayuno. A través de este equilibrio entre disciplina y compasión, Alá nos enseña que la devoción no se trata solo de rituales, sino de cultivar un corazón consciente de Él y compasivo hacia Su creación.
Ahora que se acerca el Ramadán, internalicemos estas lecciones. Ya sea a través del ayuno, la fidya o el aumento de los actos de caridad, tenemos la oportunidad de elevar nuestra espiritualidad, fortalecer nuestro vínculo con Alá y contribuir al bienestar de nuestros hermanos y hermanas musulmanes. Que Alá acepte nuestra adoración y nos conceda la capacidad de encarnar la verdadera esencia del ayuno. Amén.
¿Cuál fue la misión del Profeta del Islam y cómo podemos honrarla hoy?
La misión del Profeta Muhammad (la paz sea con él) es una piedra angular de la fe islámica y una luz guía para los musulmanes de todo el mundo. Es una historia de revelación divina, fe inquebrantable y un llamado a la justicia, la compasión y la unidad. Como miembros de Our Islamic Charity, creemos que comprender la misión del Profeta no se trata solo de reflexionar sobre el pasado, sino también de tomar medidas prácticas para incorporar sus enseñanzas en nuestras vidas actuales. En este artículo, exploraremos el profundo significado de la misión del Profeta, los eventos que la rodearon y cómo podemos honrar este legado bendito al servir a los pobres, los necesitados y a nuestra comunidad musulmana global.
El llamado divino: el comienzo de la misión del Profeta
La misión del Profeta Muhammad (la paz sea con él) comenzó en el año 610 d. C. en la cueva de Hira, cerca de La Meca. A los 40 años, el Profeta recibió la primera revelación de Dios a través del ángel Gabriel. Las palabras “Iqra” (Lee) marcaron el comienzo de un viaje transformador que cambiaría el curso de la historia. Se revelaron los primeros versículos de la Sura Al-Alaq (96:1-5), que enfatizan la importancia del conocimiento, la fe y la adoración a Dios (el único Dios verdadero).
“¡Recita en el nombre de tu Señor, Que ha creado, ha creado al hombre de sangre coagulada! ¡Recita! Tu Señor es el Munífico, que ha enseñado el uso del cálamo, ha enseñado al hombre lo que no sabía.” Corán (96:1-5)
Antes de este momento, la Península Arábiga estaba sumida en la ignorancia (Jahiliyyah), caracterizada por el tribalismo, la injusticia y la decadencia moral. La misión del Profeta era guiar a la humanidad fuera de esta oscuridad y hacia la luz del Islam. Su papel no fue solo el de mensajero, sino el de misericordia para toda la creación (Rahmatan lil-Alameen), como se describe en el Corán.
El núcleo de la misión del Profeta: justicia, compasión y unidad
La misión del Profeta Muhammad (la paz sea con él) fue multifacética. Fue un llamado a adorar solo a Alá, a establecer la justicia, a cuidar de los vulnerables y a unir a la humanidad bajo la bandera de la fe. Las enseñanzas del Profeta enfatizaron la importancia de la compasión (rahmah), la caridad (sadaqah) y la justicia social. Trabajó incansablemente para ayudar a los pobres, proteger los derechos de las mujeres y superar las brechas entre tribus y comunidades.
Uno de los aspectos más poderosos de su misión fue su enfoque en la ummah, la comunidad musulmana global. Enseñó que todos los creyentes son iguales, independientemente de su raza, riqueza o estatus. Este principio de unidad es algo que en Our Islamic Charity nos esforzamos por defender todos los días. Al distribuir dulces y pan sin levadura a los pobres y necesitados, buscamos encarnar las enseñanzas del Profeta sobre la generosidad y la solidaridad.
Celebrando la misión del Profeta: un día de reflexión y acción
Cada año, los musulmanes de todo el mundo celebran el bendito día de la misión del Profeta. Es un momento para reflexionar sobre su vida, sus luchas y su compromiso inquebrantable con la difusión del mensaje del Islam. En Our Islamic Charity, conmemoramos este día profundizando nuestra comprensión de la misión del Profeta y tomando medidas concretas para honrar su legado.
Una de las formas en que lo hacemos es preparando y distribuyendo dulces y pan sin levadura a los necesitados. Estos simples actos de bondad son un reflejo de las enseñanzas del Profeta.
El Profeta dijo: “Los mejores entre ustedes son aquellos que aportan el mayor beneficio a la humanidad”. Al alimentar a los hambrientos y llevar alegría a los corazones de los pobres, seguimos sus pasos.
Nuestras cocinas, repartidas por distintos países, son un testimonio de la unidad de la comunidad musulmana. Hombres y mujeres musulmanes se reúnen para preparar estas comidas, asegurándose de que nadie se quede atrás. No se trata de una simple caridad, sino de una celebración de nuestra fe compartida y un recordatorio de la misión del Profeta de crear una sociedad justa y compasiva.
Cómo puedes ser parte de esta misión
La misión del Profeta Muhammad (la paz sea con él) no se limita al pasado: es un llamado a la acción vivo y palpitante para todos nosotros. Como musulmanes, tenemos la responsabilidad de llevar adelante su legado sirviendo a los demás y defendiendo los valores que él defendió. Estas son algunas formas en las que puedes contribuir:
- Dona para ayudar a los necesitados: ya sea a través de medios tradicionales o métodos modernos como donaciones en criptomonedas, tus contribuciones pueden marcar una diferencia significativa en las vidas de los pobres y los necesitados. Cada dólar, cada moneda, cada satoshi, es un paso hacia el cumplimiento de la misión del Profeta.
- Ofrece tu tiempo como voluntario: únete a nosotros en nuestras cocinas o en nuestros esfuerzos de distribución. Tus manos pueden ayudar a preparar las comidas que traen alegría a innumerables familias.
- Difunde la conciencia: comparte la historia de la misión del Profeta con los demás. Educa a tu comunidad sobre la importancia de la caridad, la unidad y la compasión.
- Vive según sus enseñanzas: esfuérzate por encarnar los valores del Profeta en tu vida diaria. Sé amable, sé justo y sé una fuente de bien en el mundo.
Un legado de luz y esperanza
La misión del Profeta Muhammad (la paz sea con él) es un faro de luz que continúa guiándonos hoy. Es un llamado a la acción, un recordatorio de nuestro deber de servir a Alá y a la humanidad. En Our Islamic Charity, estamos comprometidos a honrar este legado sirviendo a los pobres, ayudando a los necesitados y uniendo a la ummah musulmana. Puedes visitar nuestros proyectos de caridad y hacer tu donación con la intención de tu corazón.
Al celebrar este día bendito, recordemos que la misión del Profeta no es solo un evento histórico, es un llamado a la acción vivo y palpitante. Juntos, podemos marcar una diferencia. Juntos, podemos ser la encarnación de sus enseñanzas. Juntos, podemos asegurar que su misión siga brillando con fuerza en nuestros corazones y en nuestras acciones.
Únete a nosotros en este viaje. Honremos la misión del Profeta siendo el cambio que deseamos ver en el mundo. ¡Allahu Akbar!