Corán

(1) Glorificado sea Quien transportó a Su Siervo durante la noche, desde la mezquita sagrada a la mezquita lejana cuyos alrededores bendije, para mostrarle algunos de Mis signos. Él todo lo oye, todo lo ve.
mezquita: La palabra “mezquita” (masyid مَسْجِيد ) desde el punto de vista lingüístico en idioma árabe se refiere a un lugar de postración, sin distinción alguna de índole religiosa. Desde el punto de vista jurídico islámico, la palabra “mezquita” constituye todo lugar en la tierra que es apto para postración y adoración de Dios, sea o no un edificio. Este versículo hace referencia a dos lugares santos en Jerusalén y La Meca, ya que son bendecidos independientemente de la presencia o ausencia de un edificio en el momento del viaje nocturno del Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, desde La Meca a Jerusalén, y luego su ascenso a los cielos. sagrada: En La Meca. mezquita lejana: En Jerusalén.

(2) He revelado a Moisés el Libro como guía para el pueblo de Israel, y les ordené: «No tomen protector fuera de Mí».
a Moisés el Libro: La Tora.

(3) ¡Él era un descendiente de quienes salvé junto a Noé [en el arca]! Fue un siervo agradecido.

(4) He revelado en el Libro lo que decreté para el pueblo de Israel: «Corromperán la Tierra dos veces y se convertirán en tiranos soberbios.

(5) Cuando corrompan por primera vez, enviaré contra ustedes siervos Míos en huestes de gran fortaleza y rudeza, que atacarán sus hogares. Esta promesa será cumplida.

(6) Luego les permitiré que retornen a sus hogares [victoriosos] expulsándolos. Los agraciaré con bienes materiales e hijos y los convertiré en un pueblo numeroso.

(7) Si obran bien será en beneficio propio, pero si obran mal será en contra suya. Cuando corrompan por segunda vez, los vencerán [sus enemigos] e ingresarán al Templo como lo hicieron la primera vez y devastarán todo lo que encuentren.
ingresarán al Templo: De Jerusalén.

(8) Luego su Señor se apiadará de ustedes, pero si reinciden [en la corrupción] los volveré a castigar. El Infierno será prisión para los que se nieguen a creer.

(9) El Corán guía por el sendero más justo y firme, y di a los creyentes que obran rectamente que recibirán una gran recompensa.

(10) Pero a quienes no crean en la otra vida les he preparado un castigo doloroso.

(11) El ser humano ruega a Dios el mal con la misma facilidad con que ruega pidiendo el bien: el ser humano es muy precipitado.
ruega a Dios el mal: Como cuando una persona maldice o reniega de su suerte.

(12) He hecho del día y de la noche dos signos: el signo de la noche es la oscuridad, y el signo del día es la luminosidad para que busquen el favor de su Señor, e hice que con estos dos signos pudieran saber el número de los años y el cómputo de los meses. Todas las cosas las he explicado detalladamente.

(13) Todo ser humano será responsable por sus actos, y el Día de la Resurrección le entregaré un libro abierto.

(14) [Se le dirá:] «Lee tu libro, pues hoy será suficiente con que tú mismo leas el registro de tus obras [para saber cuál será tu destino]».

(15) Quien siga la guía será en beneficio propio, pero quien se desvíe solo se perjudicará a sí mismo. Nadie cargará con pecados ajenos. No he castigado a ningún pueblo sin antes haberle enviado un Mensajero.
Acorde a la teología islámica, la persona que oye y comprende correctamente el mensaje del Islam, y conscientemente lo niega o rechaza, es considerado un incrédulo (kafir) y ha de morar eternamente en el fuego del Infierno, y no ha de tener excusa el Día de Resurrección. Pero aquellos que no alcancen a escuchar y comprender el mensaje del Islam por cualquier razón, como vivir en áreas remotas o porque tenían un impedimento físico o psicológico, o porque el mensaje del Islam los alcanzó cuando eran demasiado ancianos para comprender, no serán castigados en el Día de la Resurrección hasta que hayan sido probados. Se menciona en la Tradición Profética que el Mensajero de Dios, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, dijo: “Existen cuatro personas que serán excusadas en el Día de Resurrección: el sordo, el deficiente mental, el anciano, y quien no haya sido alcanzado por el mensaje. El sordo dirá: ‘¡Señor! El mensaje del Islam llegó, pero no pude oírlo’. El deficiente mental dirá: ‘¡Señor! El Islam llegó, pero los jóvenes se burlaban de mí’. El anciano dirá: ‘¡Señor! El Islam llegó, pero yo ya no podía comprender’. Aquel que no tuvo acceso al mensaje dirá: ‘¡Señor! Ningún Mensajero llegó hasta mí’. Entonces Dios les hará jurar obediencia, y luego les ordenará ingresar al fuego [esa será la prueba]. Y por aquel en cuyas manos se encuentra el alma de Mujámmad, cuando entren en él, éste será fresco y seguro para ellos”. Registrado por Ahmad en su libro Al Musnad.

(16) Cuando quiero destruir una ciudad permito que sus dirigentes siembren la corrupción, entonces la sentencia contra ella se cumple y la destruyo totalmente.

(17) Así es como he destruido a muchas generaciones luego de Noé. ¡Es suficiente con que Dios vea y sepa de los pecados que cometen Sus siervos!

(18) Quienes prefieran los placeres transitorios de la vida mundanal sepan que se los concederé a quien Yo quiera, pero les destinaré el Infierno, donde ingresarán humillados y condenados [por haberse olvidado de obrar para la otra vida].

(19) Mientras que a quienes anhelen la vida del más allá, sean creyentes y se esfuercen por alcanzarla, se les retribuirá por su esfuerzo.

(20) A todos [en esta vida] se les concederá de los favores de tu Señor, a los unos y a los otros. Sus favores no le son vedados a nadie.
a los unos: Los creyentes a los otros: Los que niegan Su existencia, Su unicidad e incluso a los que Lo asocian en la divinidad y adoran falsas deidades.

(21) Observa cómo he agraciado a unos sobre otros [con bienes materiales en este mundo], pero en la otra vida la distinción será mayor [entre los que creen y los que no creen].

(22) No adoren a otros junto a Dios, porque serán condenados y humillados.

(23) Tu Señor ha ordenado que no adoren sino a Él y que honren a sus padres. Si uno de ellos o ambos llegan a la vejez, no sean insolentes con ellos, ni siquiera les digan: «¡Uf!» Háblenles siempre con bondad.

(24) Trátenlos con humildad y compasión, y rueguen [por ellos diciendo]: «¡Oh, Señor mío! Ten misericordia de ellos como ellos la tuvieron conmigo cuando me criaron siendo niño».

(25) Su Señor es Quien mejor conoce lo que hay en sus corazones. Si son piadosos, sepan que Él perdona a los que se arrepienten.

(26) Da a los parientes lo que es su derecho, también al pobre y al viajero insolvente, pero no derroches,

(27) porque los que derrochan son hermanos de los demonios, y el demonio fue ingrato con su Señor.

(28) Pero si no puedes darles una ayuda, y esperas una misericordia de tu Señor, excúsate con amabilidad.

(29) No seas avaro ni tampoco derrochador, porque te verás censurado [en el primer caso] y arruinado [en el segundo].

(30) Tu Señor concede un sustento abundante a quien quiere, y se lo restringe a quien quiere. Él a Sus siervos los conoce bien, y los ve siempre.

(31) No maten a sus hijos por temor a la pobreza. Yo los sustento a ellos y a ustedes. Matarlos es un pecado gravísimo.
por temor a la pobreza: Esta prohibición tiene carácter eterno, lo cual implica el aborto por “miedo a la pobreza”, es decir, por motivos económicos.

(32) No se acerquen a lo que lleve a la fornicación, pues es una inmoralidad y un mal camino.

(33) No maten, pues Dios lo ha prohibido, salvo con motivo justo. A quien se le dé muerte injustamente le concedo a su familiar directo o apoderado el derecho, pero que éste no mate buscando venganza. Su derecho [a exigir justicia] está legalmente garantizado.
le concedo a su familiar directo o apoderado el derecho: Que exija y gestione justicia para castigar al culpable, para que sea ejecutado u ofrezca una indemnización según el caso. no mate buscando venganza: No puede buscarse la justicia por mano propia, sino que debe recurrirse a las autoridades establecidas en cada sociedad.

(34) No utilicen los bienes del huérfano a menos que sea para beneficiarlo, y entréguenselos cuando alcance la madurez. Cumplan con sus compromisos, porque se los interrogará por ellos.

(35) Midan y pesen con equidad. Esto es lo más conveniente y mejor para ustedes.

(36) No hagan ni digan nada si no tienen conocimiento. Serán interrogados acerca de [lo que hayan hecho con] su oído, vista y corazón.

(37) No caminen por la Tierra con arrogancia, pues ella no se abrirá por su andar, ni tampoco podrán igualar a las montañas en altura [para ser tan imponentes como ellas].

(38) Todos estos comportamientos son perjudiciales para ustedes y detestables ante su Señor.

(39) Esto es parte de la sabiduría que tu Señor te ha revelado. No adoren a nadie junto a Dios porque serán arrojados en el Infierno, condenados y humillados.

(40) ¿Acaso creen que su Señor prefirió para ustedes los hijos varones y para Sí hijas que son los ángeles? Lo que dicen es muy grave.
hijas que son los ángeles: Algunos idólatras paganos afirmaban que los ángeles eran las hijas de Dios.

(41) En este Corán he expuesto todo tipo de argumentos para que reflexionen, pero [a algunos] esto los hace extraviarse aún más.

(42) Diles: «Si junto a Dios hubiera otros dioses, como dicen [los idólatras], ellos buscarían acercarse al Señor del Trono [para complacerlo]».

(43) ¡Glorificado sea! Él está por encima de lo que dicen.

(44) Lo glorifican los siete cielos, la Tierra y todo cuanto hay en ellos. No existe nada que no Lo glorifique con alabanzas, aunque ustedes no puedan percibir sus glorificaciones. Él es Magnánimo, Perdonador.

(45) Cuando recitas el Corán ponemos un velo imperceptible entre tú y quienes no creen en la otra vida.

(46) [Como respuesta a su rechazo] hice sus corazones duros y sus oídos sordos para que no pudieran comprender [el Mensaje]. Cuando mencionas en el Corán que tu Señor es la única divinidad [con derecho a ser adorada], te dan la espalda disgustados.

(47) Yo bien sé cómo se burlan cuando te escuchan [recitar el Corán] o cuando hablan en secreto; y dicen los idólatras: «Están siguiendo a un hombre hechizado».

(48) Observa cómo te comparan y por ello se extravían. No pueden encontrar el camino.

(49) Dicen: «¿Acaso cuando seamos huesos y polvo seremos resucitados y creados nuevamente?»

(50) Respóndeles: «¡Sí! Aunque se conviertan en piedra, hierro

(51) o cualquier otra materia que veneren en su pensamiento». Dirán: «¿Quién nos resucitará?» Respóndeles: «Quien los creó por primera vez». Pero negando con su cabeza te dirán: «¿Cuándo?» Diles: «Es posible que sea pronto».

(52) El día que los convoque responderán alabándolo, y les parecerá que no han permanecido [en las tumbas] sino poco tiempo.

(53) Exhorta a Mis siervos a hablar con respeto, porque el demonio quiere sembrar la discordia entre ellos. El demonio es el enemigo declarado del ser humano.

(54) Su Señor conoce lo que hay en sus corazones. Si quiere tendrá misericordia con ustedes, o si quiere los castigará [con justicia]. Pero tú [¡oh, Mujámmad!] no eres responsable de lo que ellos hagan.

(55) Tu Señor conoce bien a quienes están en los cielos y en la Tierra. He favorecido a los Profetas unos sobre otros: a David le revelé los Salmos.

(56) Diles: «Aquellos que invocan en lugar de Dios no pueden salvarlos de ningún mal, ni siquiera evitarlo».

(57) [Aquellos] a los que ustedes invocan buscan el medio de acercarse más a su Señor, anhelan Su misericordia y temen Su castigo. ¡Porque el castigo de tu Señor es temible!

(58) No hay ninguna ciudad [de incrédulos] que no vaya a destruir o castigar antes del Día de la Resurrección. Esto es lo que ha sido decretado y registrado en el Libro [preservado].

(59) No les envié los milagros que pedían porque los desmentirían como lo hicieron los pueblos del pasado. Al pueblo de Zamud le envié la camella como un milagro evidente, pero cometieron la injusticia [de matarla]. Entonces les envié signos para atemorizarlos.

(60) Cuando te dije [¡oh, Mujámmad!]: «Tu Señor tiene poder total sobre las personas [y Él te protegerá]». Lo que te mostré y el árbol maldito mencionado en el Corán, no es sino para probar la fe de las personas. Los atemorizo [con Mis signos], pero esto les incrementó aún más su desobediencia.
Lo que te mostré: La noche de tu ascensión a los cielos.

(61) [Recuerda] cuando dije a los ángeles: «Hagan una reverencia ante Adán». Todos hicieron la reverencia excepto Iblís, quien dijo: «¿Acaso voy a hacer una reverencia ante quien has creado de barro?»
El demonio fue el primer ser en discriminar a un ser humano por su origen. La mayor enseñanza que extraemos de aquí es que quien discrimina a una persona por su origen o por la forma en que fue creada por Dios, está siguiendo el ejemplo de su antecesor, el demonio.

(62) Dijo también: «¿Por qué lo has honrado más que a mí?» Si me das tiempo hasta el Día de la Resurrección desviaré a la mayoría de sus descendientes.

(63) Dijo [Dios]: «¡Vete! Y quienes de ellos te sigan merecerán el Infierno, pues es el castigo que les tengo reservado.

(64) Seduce con tus palabras a quien puedas de ellos, arremete con tu caballería y con tu infantería. Hazte su socio inseparable en sus bienes e hijos y hazles las promesas que quieras. Pero sepan que el demonio solo hace promesas falsas».
Su poder sobre ellos no se basa en pruebas o argumentos, sino que simplemente los incita a cometer acciones según sus propios deseos y pasiones. Son ellos los que permiten a su verdadero enemigo, el demonio, convertirse en su aliado y amo. Cuando se entregan a él, le dan control sobre sus personas. Dios no le concedió al demonio poder sobre ningún ser humano, hasta que éste se entregue a sí mismo obedeciéndolo y asociándolo con Dios. Solo entonces Dios permite al demonio subyugar al ser humano dominándolo.

(65) [Dijo Dios:] «Pero no tienes poder alguno sobre Mis siervos creyentes». Es suficiente con tu Señor como protector [para quienes se encomiendan a Él].

(66) Su Señor es Quien impulsa los barcos en el mar para que con ellos puedan procurar Su favor. Él es Misericordioso con ustedes.

(67) Cuando los alcanza una desgracia en el mar se dan cuenta que cuanto invocaban fuera de Dios no puede salvarlos, y que solo Dios es Quien puede hacerlo. Pero cuando los salva llevándolos a tierra firme, Lo niegan nuevamente. ¡El ser humano es ingrato!

(68) ¿Acaso se sienten a salvo de que Dios los haga tragar por la tierra o que les envíe un huracán? Si así lo hiciera, no encontrarían quién los pudiera proteger.

(69) ¿O se sienten seguros de que cuando se encuentren en el mar otra vez, Él no les envíe una tormenta y los ahogue como castigo a su ingratitud? Si así lo hiciera, no tendrían quién Le reclamara por ustedes.

(70) He honrado a los hijos de Adán y les he facilitado los medios para viajar por la tierra y por el mar, les he proveído de todo lo bueno y los he favorecido sobre muchas otras criaturas.

(71) El día que convoque a todos los seres humanos junto a sus guías y les entregue sus registros, a quien le sea entregado el libro de sus obras en la derecha, [se alegrará] leyendo su libro porque verá que no ha sido defraudado en lo más mínimo.
sus guías: Sus Profetas o los Libros Sagrados que solían seguir.

(72) Pero quien haya estado en esta vida ciego [en la incredulidad], en la otra también lo estará y más perdido aún.

(73) Los idólatras [¡oh, Mujámmad!] querían persuadirte que cedieras a favor de sus peticiones, contrariando las instrucciones que te había revelado. Si lo hubieras hecho, te habrían convertido en su aliado.

(74) Si no te hubiera fortalecido, te habrías inclinado a aceptar parte de sus peticiones.

(75) Y si hubieras cedido en algo, te habría hecho sufrir un castigo doble en esta vida y en la otra. No hubieras encontrado quién te protegiera de Mí.
te habría hecho sufrir un castigo: El hecho de que el Corán reprenda a Mujámmad y le advierta, es una prueba más de que Mujámmad no es el autor del Corán.

(76) Casi logran intimidarte para que abandones tu tierra [La Meca], pero si lo hubiesen logrado no habrían permanecido en ella sino poco tiempo [porque habría enviado sobre ellos el castigo].

(77) Lo mismo sucedió con los Mensajeros que envié antes de ti. No encontrarás cambio alguno en Mi proceder.

(78) Observa las oraciones prescritas desde pasado el mediodía hasta la oscuridad de la noche, y también la oración del alba, y prolonga la recitación en ella, pues ésta es atestiguada [por los ángeles de la noche y el día].

(79) También levántate parte de la noche a realizar oraciones voluntarias, para que tu Señor te conceda un rango digno de alabanza.

(80) Di: «¡Señor mío! Concédeme una entrada y una salida dignas [en todos los asuntos de mi vida], y concédeme los medios para lograr el triunfo».
En este versículo Dios le ordena al Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, que emigre de La Meca a Medina, por lo que “una salida digna” es la salida de La Meca, y “una entrada digna” es la entrada a Medina.

(81) Y di: «Ha triunfado la Verdad y se ha disipado la falsedad; la falsedad siempre se desvanece».

(82) Revelé el Corán, que es cura para los corazones y misericordia para los creyentes, pero al mismo tiempo no hace sino aumentar la perdición de los idólatras.

(83) El incrédulo, cuando lo agracio, no Me agradece por arrogancia; pero cuando lo aflige un mal se desespera.

(84) Diles: «Que cada uno obre como le plazca, pero sepan que su Señor conoce a quien está mejor encaminado».

(85) Te preguntan acerca del espíritu. Diles: «El espíritu es una de las creaciones de Dios, de las que solo Él tiene conocimiento. No se les ha permitido acceder sino a una pequeña parte del inmenso conocimiento de Dios».
Todo conocimiento descubierto será siempre pequeño comparado con la dimensión de los secretos y misterios del universo, todos abarcados por el conocimiento del Creador, el Eterno. Porque Su conocimiento es infinito, mientras que la comprensión humana es limitada.

(86) Si quisiera, borraría todo lo que te he revelado, y entonces no encontrarías quién abogara por ti ante Mí [para que lo pudieras recordar].
todo lo que te he revelado: Tanto de los libros como de la memoria de las personas.

(87) Pero no lo haré por misericordia. El favor con el que tu Señor te ha agraciado es inmenso.

(88) Diles: «Si los seres humanos y los yinnes se unieran para redactar un texto similar al Corán, no podrían lograrlo, aunque se ayudaran mutuamente».

(89) He expuesto a los seres humanos en este Corán toda clase de ejemplos. Pero la mayoría de las personas no creen y rechazan la Verdad.

(90) Dicen [los que se niegan a creer]: «No creeremos en ti hasta que no hagas fluir para nosotros vertientes de la tierra

(91) o poseas un huerto con palmeras y vides, y hagas brotar en él ríos,

(92) o hagas descender sobre nosotros un castigo del cielo como advertiste, o nos traigas a Dios y a los ángeles para que los podamos ver,

(93) o poseas una casa de oro o asciendas al cielo, y aun así no creeremos en ti a menos que nos traigas del cielo un libro que podamos leer». Diles: «¡Glorificado sea mi Señor! Pero, ¿no soy acaso solo un ser humano enviado como Mensajero?»
un libro que podamos leer: En el que se mencione que tú eres un Profeta de Dios.

(94) Lo que impidió que creyera la gente cuando se les presentaron los Mensajeros con la guía fue la misma retórica: [Decían] «¿No encontró Dios nada mejor que enviar a un ser humano como Mensajero?»

(95) Diles: «Si los ángeles habitaran la Tierra, entonces les habría enviado del cielo un ángel como Mensajero».

(96) Diles: «Dios es suficiente testigo de mi veracidad entre ustedes y yo. Él está bien informado sobre Sus siervos y los observa».

(97) A quien Dios guíe estará bien encaminado, pero a quienes permita que se extravíen nadie los podrá socorrer salvo Él. Los congregaré de cabeza el Día de la Resurrección, ciegos, mudos y sordos. El Infierno será su morada; siempre que el fuego se atenúe avivaré su llama.

(98) Ese será su castigo por no haber creído en Mis milagros y haber dicho: «¿Acaso cuando seamos huesos y polvo seremos resucitados y creados nuevamente?»

(99) ¿Acaso no ven que Dios, Quien ha creado los cielos y la Tierra, tiene el poder de crearlos nuevamente? Les ha establecido un plazo determinado para su resurrección, pero los idólatras lo niegan con incredulidad.

(100) Diles: «Si tuvieran en sus manos las arcas de mi Señor, no las compartirían por temor a empobrecer. ¡Qué avaro es el ser humano!»

(101) Concedí a Moisés nueve milagros evidentes. Pregunta [¡oh, Mujámmad!] al pueblo de Israel si no es verdad que cuando [Moisés] se presentó ante el Faraón, éste le dijo: «¡Oh, Moisés! Creo que estás afectado por un hechizo».

(102) Dijo [Moisés]: «Tú sabes bien que solo el Señor de los cielos y de la Tierra ha enviado estos milagros claros. ¡Oh, Faraón! Creo que estás perdido».

(103) [El Faraón] quiso expulsarlos de la tierra, pero lo ahogué junto a su ejército.
quiso expulsarlos de la tierra: Egipto.

(104) Luego dije al pueblo de Israel: «Habiten la tierra y sepan que cuando llegue el Día del Juicio del que Dios les advirtió, los haré comparecer a todos».

(105) Lo he revelado [al Corán] con la verdad y lo he protegido para que así les llegue. No te he enviado [¡oh, Mujámmad!] sino como albriciador y amonestador.

(106) Te he revelado el Corán en partes para que se lo recites gradualmente a la gente. Te lo he ido revelando poco a poco.

(107) Diles: «Crean o no crean en él [es su responsabilidad]». Quienes fueron agraciados con el conocimiento de las revelaciones anteriores, cuando escuchan la recitación del Corán se prosternan ante Dios.

(108) Y dicen: «¡Glorificado sea nuestro Señor! La promesa de nuestro Señor se ha cumplido».

(109) Se prosternan ante Dios con los ojos llenos de lágrimas, y [el Corán] les acrecienta su humildad y sumisión.

(110) Diles: «Ya sea que Lo invoquen diciendo: ¡Oh, Dios!, ¡Oh, Compasivo!, O cualquier otro nombre con el que Le invoquen, Él los oirá. Sepan que Él posee los nombres [y atributos] más sublimes. Cuando realicen una oración moderen su voz en la recitación, no la hagan con voz muy alta ni tampoco en silencio».

(111) Di: «¡Alabado sea Dios! Él no tiene ningún hijo ni tiene asociado alguno en Su soberanía ni necesita de ningún socorredor». ¡Glorifica a Dios proclamando Su grandeza!

Corán

(1) La orden de Dios [para que comience el Día del Juicio] llegará pronto, no pretendan adelantarla. ¡Glorificado sea! Él está por encima de cuanto Le asocian.

(2) Él envía a los ángeles con la revelación de Sus órdenes a quien Le place de Sus siervos para que advierta: «No hay otra divinidad más que Yo, tengan temor de Mí».

(3) Dios creó los cielos y la Tierra con un fin justo y verdadero. Él está por encima de cuanto Le asocian.

(4) Creó al ser humano de [algo tan ínfimo como] un óvulo fecundado, y sin embargo este discute constantemente [la existencia y el poder de su Señor].

(5) Dios creó a los ganados, de los cuales ustedes obtienen sus abrigos y otros beneficios, y también de ellos se alimentan.

(6) Ustedes se regocijan cuando los arrean por la tarde y cuando los llevan a pastar por la mañana.

(7) Llevan sus cargas a lugares que ustedes no podrían alcanzar sino con mucha dificultad. Su Señor es Compasivo, Misericordioso.

(8) [Dios creó] los caballos, las mulas y los asnos como montura y para que se luzcan con ellos. Y creó muchas otras cosas que no conocen.

(9) Dios es Quien enseña cuál es el sendero recto, del que muchos se desvían. Si hubiera querido los habría guiado a todos.
Pero le concedió a las personas el libre albedrio, para que cada uno elija libremente si sigue o no el camino recto de Dios.

(10) Él es Quien hace descender agua del cielo para que beban de ella y brote la vegetación de la que pastorean sus rebaños.

(11) Con ella hace crecer los cereales, los olivos, las palmeras, las vides y toda variedad de frutos. En ello hay signos para quienes reflexionan.

(12) Dios ha creado para beneficio de ustedes la noche, el día, el Sol, la Luna y las estrellas; todos están sometidos a Su voluntad. En esto hay signos para quienes razonan.

(13) Él creó para ustedes una gran diversidad en la Tierra. En ello hay signos para quienes recapacitan.

(14) Él es Quien ha puesto al mar a servicio de ustedes para que puedan comer de él carne fresca y extraer adornos para engalanarse. Pueden ver los barcos surcarlo y usarlos para buscar la gracia de Dios [su sustento]. ¿Por qué no son agradecidos?

(15) Dios afirmó la tierra con montañas para que se estabilizara, dispuso ríos y caminos para que puedan guiarse,
para que se estabilizara: La Geología moderna ha comprobado que las montañas tienen raíces profundas debajo de la superficie terrestre, y que esas raíces pueden superar varias veces las dimensiones de la elevación de su superficie terrestre. Por lo tanto, la palabra adecuada para describir a las montañas en base a esta información es “estaca”, siendo que la mayor parte de una estaca correctamente colocada se encuentra bajo la superficie del suelo. Las montañas desempeñan un papel importante en la estabilización de la corteza terrestre, ya que ellas impiden el estremecimiento (movimiento irregular, temblor) de la Tierra.

(16) y también señales, y para que se orienten en sus viajes, [creó] las estrellas.

(17) ¿Es procedente comparar a Quien es capaz de crear con quien no puede crear nada? ¿Acaso no recapacitan?

(18) Si intentaran contar las gracias de Dios no podrían enumerarlas. Dios es Absolvedor, Misericordioso.

(19) Dios sabe lo que ocultan y lo que manifiestan.

(20) [Los ídolos] a quienes ustedes invocan en lugar de Dios, no solo no pueden crear absolutamente nada, sino que ellos mismos son creados.

(21) Son [objetos] inertes, sin vida. ¿Cómo van a saber ellos cuándo serán resucitados?

(22) Su divinidad es una sola, pero los corazones de quienes no creen en la otra vida no admiten [la fe] porque son soberbios.

(23) No hay duda de que Dios sabe lo que ocultan y lo que manifiestan. Él no ama a los soberbios.

(24) Cuando se les pregunta [a los idólatras]: «¿Qué opinan sobre lo que ha revelado su Señor?» Responden: «Son leyendas de los antiguos».

(25) Éstos cargarán con sus propios pecados el Día de la Resurrección, y con parte de los pecados de aquellos a quienes extraviaron y que los siguieron por ignorancia. ¡Qué pésima es la carga que llevarán!
Este versículo indica que el ser humano cargará con el peso de los pecados que él mismo haya cometido y el pecado de quienes él haya desviado con sus acciones o sus palabras. De igual manera, los que enseñan la buena guía se beneficiarán de sus propias obras y obtendrán recompensa por todo aquel que haya seguido su ejemplo y enseñanza.

(26) También se complotaron [los incrédulos] anteriormente [en Babel], pero Dios destruyó sus [altas] edificaciones desde los cimientos y los techos se derrumbaron sobre ellos. El castigo les llegó de donde menos lo esperaban.

(27) Luego, el Día de la Resurrección, Dios los humillará y les preguntará: «¿Dónde están aquellos que ustedes Me asociaban y a los que defendían?» [Ese día] quienes recibieron el conocimiento [de cada nación] dirán [a sus pueblos]: «Hoy, la humillación y el castigo pesarán sobre los incrédulos».

(28) Cuando los ángeles tomen las almas de quienes hayan sido incrédulos, éstos se entregarán [diciendo]: «No cometimos ningún mal». [Pero los ángeles responderán:] «¡Sí lo cometieron! Dios sabe bien lo que hacían.

(29) Ingresen por las puertas del Infierno, allí permanecerán eternamente. ¡Qué pésima morada la que tendrán los soberbios!»

(30) [Y ese día] se les preguntará a los piadosos: «¿Qué ha revelado su Señor?» Responderán: «Lo mejor». Quienes hayan obrado rectamente obtendrán en este mundo una bella recompensa, pero la morada de la otra vida será aún mejor. ¡Qué placentera será la morada de los piadosos!

(31) Ingresarán a los Jardines del Edén por donde corren ríos, y allí tendrán todo lo que deseen. Así retribuye Dios a los piadosos.

(32) Cuando los ángeles tomen las almas de los piadosos, les dirán: «¡Que la paz sea sobre ustedes! Ingresen al Paraíso como recompensa por sus obras».

(33) ¿Acaso esperan [los incrédulos] que se presenten ante ellos los ángeles [para tomar sus almas] o que los azote el castigo [para recién entonces creer]? Eso hicieron quienes los precedieron. Dios no fue injusto con ellos [al enviarles el castigo], sino que ellos fueron injustos consigo mismos.

(34) Sufrirán las consecuencias de las malas acciones que cometieron y los azotará el castigo del cual se burlaban.

(35) Los idólatras argumentarán: «Si Dios hubiera querido, ni nosotros ni nuestros antepasados habríamos adorado a otro fuera de Él, ni habríamos declarado ilícitas las cosas sin Su permiso». Lo mismo dijeron quienes los precedieron. Pero los Mensajeros solo tienen la obligación de transmitir el Mensaje con claridad [y Dios será Quien los juzgará].

(36) Envié a cada nación un Mensajero [para que los exhortara a] adorar a Dios y a rechazar la idolatría. Algunos de los pueblos fueron guiados por Dios, y a otros se les decretó el extravío. ¡Viajen por el mundo y observen cual fue el destino de quienes desmintieron [Mis signos]!

(37) Debes saber [¡oh, Mujámmad!] que por más que te empeñes en guiarlos, Dios no guiará [por la fuerza] a quienes hayan elegido el extravío. Éstos no tendrán quién los auxilie.

(38) Juran solemnemente por Dios que Él no resucitará a los muertos. ¡Sí! [Los resucitará,] pues es una promesa inalterable [de Dios] y Él no falta a Su promesa. Aunque la mayoría de la gente lo ignore.

(39) [Dios los resucitará] para demostrarles cuál era la Verdad sobre la que discrepaban y para que los incrédulos comprendan que estaban equivocados.

(40) Cuando decreto algo, digo: «¡Sé!» Y es.

(41) A quienes emigraron por la causa de Dios después de haber sido perseguidos, les concederé una hermosa recompensa en esta vida, aunque la recompensa en la otra vida será aún mayor, si lo supieran.

(42) Ellos fueron pacientes y se encomendaron plenamente a su Señor.

(43) No envié antes de ti sino hombres a quienes les transmitía Mi revelación. ¡Consulten a la gente de conocimiento lo que no sepan!

(44) Los envié con evidencias claras y con Libros revelados. Y a ti [¡oh, Mujámmad!] te he revelado el conocimiento [de la Sunnah] para que expliques a la gente la revelación [el Corán] que habían recibido, para que así reflexionen.

(45) ¿Acaso quienes se confabularon [contra el Profeta] se sienten a salvo de que Dios los haga tragar por la tierra, o de que les llegue el castigo por donde menos lo esperan?

(46) ¿O de que los sorprenda ocupados en sus quehaceres sin que puedan evitarlo?

(47) ¿O de que los alcance una lenta decadencia? Su Señor es Compasivo, Misericordioso [y no les adelantará el castigo].

(48) ¿Acaso no observan que todo cuanto Dios ha creado proyecta su sombra a su derecha y a su izquierda prosternándose ante Dios, mostrando su humildad?

(49) Ante Dios se prosternan los ángeles y toda criatura existente en los cielos y en la Tierra, y no se comportan con soberbia.

(50) [Los ángeles] temen a su Señor que está por encima de ellos, y ejecutan todo cuanto se les ordena.

(51) Dios dice: «No adoren falsas divinidades. Yo soy la única divinidad, tengan temor devocional solo de Mí».

(52) A Él pertenece cuanto hay en los cielos y en la Tierra. Solamente a Él se debe adorar. ¿Acaso van a temer a otro que no sea Dios?

(53) Todas las gracias que tienen provienen de Dios. Pero ustedes solo recurren a Él cuando padecen una desgracia.

(54) Luego, cuando los libra de la desgracia, algunos de ustedes vuelven a dedicar actos de adoración a otros que a su Señor,

(55) y no agradecen cuanto les ha concedido. Disfruten [transitoriamente, que] pronto sabrán.

(56) Ofrecen una parte de cuanto Dios les concede a sus ídolos, y no saben que ellos no pueden perjudicarlos ni beneficiarlos. ¡Por Dios! Serán interrogados sobre lo que inventan.

(57) ¡Glorificado sea Dios! Le atribuyen hijas, pero solo desean para sí mismos los hijos varones.
Le atribuyen hijas: Estos idólatras afirmaban que los ángeles eran de sexo femenino y que eran hijas de Dios.

(58) Cuando se le anuncia a uno de ellos [el nacimiento de] una niña, se refleja en su rostro la aflicción y la angustia

(59) por lo que se le ha anunciado, se esconde de la gente avergonzado y duda si la dejará vivir a pesar de su deshonra o la enterrará viva. ¡Qué pésimo es lo que hacen!
la enterrará viva: Ver Corán 81:9.

(60) Quienes no creen en la otra vida son el peor ejemplo [de ignorancia e incredulidad], y Dios es el más sublime ejemplo [de perfección absoluta]. Él es el Poderoso, el Sabio.

(61) Si Dios castigara inmediatamente a la gente por sus injusticias, no dejaría ningún ser vivo sobre la faz de la Tierra. Pero les da una prórroga por un plazo determinado, y cuando venza su plazo no podrán retrasarlo ni adelantarlo ni siquiera un instante.

(62) Le atribuyen a Dios lo que detestan para sí mismos e inventan mentiras diciendo que alcanzarán el bienestar [en esta vida y en la otra]. Ellos serán los primeros en ser arrojados al Fuego.
lo que detestan para sí mismos: Referencia a las hijas mujeres.

(63) Yo, Dios, juro por Mí mismo que envié Mensajeros a las naciones que te precedieron [¡oh, Mujámmad!], pero el demonio les hizo ver sus malas acciones como buenas. Él es su aliado en esta vida, pero en la otra recibirán un castigo doloroso.

(64) No te he revelado el Libro [¡oh, Mujámmad!] sino para que les aclares aquello sobre lo que discrepaban, como guía y misericordia para los creyentes.

(65) Dios hace descender agua del cielo dando vida con ella a la tierra azotada por la sequía. En esto hay un signo para quienes recapacitan.

(66) En los ganados tienen ustedes un ejemplo [del poder divino]. Les doy a beber de lo que se produce en sus vientres, entre quimo y sangre: leche pura, gustosa para quienes la beben.

(67) De los frutos de las palmeras y de las vides se obtiene un embriagante y también un sustento puro. En esto hay un signo para quienes razonan.
Este versículo es cronológicamente previo al que establece la prohibición de las bebidas alcohólicas y embriagantes. Ver Corán 2:219, 4:43 y 5:90-91.

(68) Tu Señor les inspiró a las abejas: «Habiten en las moradas que hayan construido en las montañas, en los árboles y en las que la gente les construya.
las abejas: Los machos o zánganos no contribuyen en la elaboración de la miel. Su única función en la colmena es inseminar a la abeja reina. Las abejas obreras tienen a su cargo producir la miel. En la lengua árabe la declinación de los verbos es completa y permite distinguir el género del sujeto, masculino o femenino. Que el Corán utilice sistemáticamente los verbos y declinaciones en femenino al referirse y dirigirse a las abejas indica que conoce que son las hembras las que trabajan en la fabricación de la miel. No debemos olvidar que es imposible que estos datos sobre las abejas fueran conocidos hace 1.400 años. Que Dios haya señalado este hecho es otro milagro del Corán.

(69) Aliméntense de los frutos y transiten por donde les ha facilitado su Señor». De su abdomen sale un jarabe de diferentes colores que es medicina para la gente. En esto hay un signo para quienes reflexionan.
es medicina para la gente: La miel es una “medicina para la gente” tal como lo establece este versículo. Entre los beneficios de la miel que se conocen en la actualidad encontramos que es de fácil digestión, se difunde rápidamente a través de la sangre, ayuda en la formación de la sangre, tiene efectos positivos en la regulación de la circulación sanguínea, funciona como protección contra problemas en la circulación capilar y la arteriosclerosis, tiene propiedad bactericida, es antioxidante, fuente de vitaminas y minerales, y se utiliza para curar heridas porque la viscosidad de la miel provee una barrera protecTora que impide que las heridas se infecten. Estimula la formación de nuevos vasos capilares y el crecimiento de los fibroblastos que reemplazan el tejido conectivo en las capas más profundas de la piel, así como la producción de fibras de colágeno que fortalecen la reparación del tejido. La miel tiene una acción anti inflamatoria que reduce la hinchazón en torno de las heridas. A diferencia de los antisépticos y los antibióticos, no perjudica el proceso de cicatrización debido a efectos adversos sobre los tejidos lesionados. Se deduce de todos estos datos que la miel tiene grandes propiedades “curativas”. Sin duda es uno de los milagros del Corán que Dios, Exaltado sea, ha revelado.

(70) Dios los crea a todos y luego los hace morir. A algunos de ustedes los hace llegar a la vejez en la que olvidan todo cuanto sabían. Dios lo sabe todo, es Poderoso.

(71) Dios facilita los recursos a unos más que a otros. Los que han sido favorecidos con más recursos se niegan a compartirlos con aquellos que posee su diestra para no equipararse con ellos. ¿Acaso se niegan a reconocer [y compartir] las gracias de Dios?

(72) Dios les ha creado cónyuges de su misma naturaleza, y luego les concede hijos y luego nietos. Dios les ha proveído todo lo bueno y beneficioso. ¿Acaso creen en las falsedades y reniegan de la gracia de Dios?

(73) En lugar de adorar a Dios, adoran lo que no tiene ni tendrá dominio alguno sobre las provisiones del cielo y de la Tierra.

(74) No comparen a Dios. Dios sabe y ustedes no saben.
No comparen a Dios: El Sagrado Corán establece que la esencia divina y Sus nombres y atributos deben comprenderse a la luz de tres principios. Primero: creer que Dios y Sus atributos no se asemejan a ninguno de los atributos de los seres creados (ver Corán 42:11, 112:4 y 16:74). Segundo: creer en las descripciones que Dios ha hecho de Sí mismo (ver Corán 2:140) y en las descripciones que realizó el Profeta sobre Él, ya que él hablaba con la revelación (ver Corán 53:3-4). Tercero: no pretender comprender la verdadera naturaleza de los atributos divinos, ya que dicha comprensión es imposible para nuestra mente limitada (ver Corán 20:110).

(75) Dios les expone un ejemplo [para que reflexionen]: ¿Puede equipararse un [incrédulo] esclavo [de sus pasiones] que carece de todo poder, con [un creyente] a quien le he concedido un sustento generoso y hace caridades en privado y en público? [¿Cómo pueden entonces comparar al Creador con los seres creados?] ¡Alabado sea Dios! La mayoría de la gente no reflexiona.

(76) Dios les expone otro ejemplo [para que reflexionen acerca de Su unicidad]: ¿Acaso pueden equipararse dos personas: un incapaz y mudo que no hace nada bien y representa una carga para su tutor, y una persona que alza su voz para defender la justicia y está en el sendero recto?

(77) Dios conoce los secretos de los cielos y de la Tierra. La Hora [del Día del Juicio] llegará tan rápido como un abrir y cerrar de ojos, o más rápido aún. Dios tiene poder sobre todas las cosas.

(78) Dios los hizo nacer del vientre de sus madres sin conocimiento [del mundo que los rodea]. Él los dotó de oído, vista e intelecto, para que sean agradecidos.

(79) ¿No han observado las aves suspendidas en el cielo? Es Dios quien las sustenta. En esto hay signos para los creyentes.

(80) Dios hizo que sus viviendas sean para ustedes un lugar de sosiego. Puso a su disposición el cuero de los rebaños para que hagan con él sus tiendas, las cuales son fáciles de transportar los días que viajan o acampan. También de su lana, pelo y crin hacen utensilios y alfombras con las que hacen confortable esta vida.

(81) Dios les proporcionó sombra de cuanto creó, refugios en las montañas, vestimentas que los resguardan del calor [y el frío] y armaduras que los protegen en los combates. Así es como Dios les provee de Sus gracias para que se sometan a Él.

(82) Pero si se niegan a creer, sabe que a ti solo te incumbe transmitir [el Mensaje] con claridad.

(83) Ellos saben que las gracias provienen de Dios pero lo niegan; la mayoría de ellos son ingratos.

(84) El día que haga surgir de cada nación [a su Profeta] como testigo, no se les permitirá a los incrédulos excusarse ni que se arrepientan.

(85) Cuando los injustos vean el castigo, no habrá atenuantes ni prórrogas.

(86) Cuando los idólatras vean a sus ídolos dirán: «¡Señor nuestro! Éstos son los ídolos a quienes invocábamos en lugar de Ti», pero ellos [los ídolos] los contradecirán: «Son unos mentirosos».

(87) Ese día serán entregados a Dios [para que los castigue], y sus mentiras se desvanecerán.
serán entregados a Dios [para que los castigue]: Los ídolos que solían adorar.

(88) A los incrédulos que desviaron a la gente del camino de Dios, les duplicaré el castigo por haber sembrado la corrupción.

(89) [El Día del Juicio] haré surgir de cada nación [a su Profeta] para que atestigüe en contra de ellos, y a ti [¡oh, Mujámmad!] como testigo de tu nación. Te he revelado el Libro que contiene todas las explicaciones, el cual es guía, misericordia y albricias para los musulmanes que se someten a Dios.

(90) Dios ordena la justicia, hacer el bien y ayudar a la familia; pero prohíbe la obscenidad, la mala conducta y la opresión. Así los exhorta para que reflexionen.

(91) Cumplan su compromiso con Dios. No quebranten los juramentos después de haberlos realizado, habiendo puesto a Dios como testigo. Dios sabe bien cuanto hacen.

(92) No sean como quien deshace el hilado que había realizado cuidadosamente. No hagan del juramento un medio de engaño. No rompan un pacto hecho con una nación por beneficiarse de un pacto con otra nación más poderosa. Dios los pone a prueba para que se les evidencie quienes Lo obedecen de quienes no. El Día del Juicio juzgará entre ustedes sobre lo que discrepaban.

(93) Si Dios hubiera querido habría hecho de ustedes una sola nación [de creyentes]. Pero se descarría quien quiere y se guía quien quiere. Todos serán interrogados por cuanto hicieron.

(94) No hagan de sus juramentos una herramienta de engaño. Si lo hacen se los castigará por haberse extraviado y desviado a otros del sendero de Dios, y el castigo que sufrirán será terrible.

(95) No vendan su compromiso con Dios a vil precio. Lo que Dios les tiene reservado en esta vida y en la otra es mejor para ustedes, si lo supieran.

(96) [Sepan que] lo que ustedes tienen es temporal y lo que Dios tiene es eterno. A quienes hayan sido pacientes les multiplicaré la recompensa de sus obras.

(97) Al creyente que obre rectamente, sea varón o mujer, le concederé una vida buena y le multiplicaré la recompensa de sus buenas obras.

(98) Cuando recites el Corán refúgiate en Dios del demonio maldito.

(99) El demonio no tiene poder sobre los creyentes que se encomiendan a su Señor.

(100) Solamente tiene poder sobre quienes lo toman como aliado protector y aquellos que lo adoran asociándolo [en el poder y la adoración] a Dios.

(101) Cuando revelo un precepto para abrogar otro, y Dios bien sabe lo que hace, dicen [tus detractores]: «Eres tú quien lo ha inventado». Pero la mayoría de ellos son ignorantes.

(102) Diles: «Es el Espíritu Santo [el ángel Gabriel] quien lo ha revelado [por orden] de tu Señor con la Verdad para afirmar a los creyentes, y como guía y albricias para los musulmanes que se someten a Dios».

(103) Sé muy bien que dicen: «Es un hombre quien se lo transmite [el Corán]». Pero bien saben que el idioma de quien ellos aluden no es el árabe, mientras que éste [Corán] es en árabe puro.
“Es un hombre quien se lo transmite [el Corán]”: Algunos idólatras acusaban a Mujámmad de que un vendedor cristiano que habitaba en La Meca, y no conocía sino poco del idioma árabe, era el que le dictaba el Corán.

(104) A quienes no crean en los signos de Dios, Dios no los guiará y recibirán un castigo doloroso.

(105) Solamente inventan mentiras quienes no creen en los signos de Dios. Ellos son los mentirosos [y no el Profeta].

(106) Quienes renieguen de la fe en Dios por haber sido forzados a ello, permaneciendo sus corazones tranquilos [y firmes] en la fe [no serán reprochados]; pero quienes lo hagan y se complazcan con la incredulidad, incurrirán en la ira de Dios y tendrán un castigo terrible,
[no serán reprochados]: Los politeístas de La Meca persiguieron y torturaron a uno de los compañeros del Profeta llamado ´Ammar ibn Yasir hasta que lograron hacerlo pronunciar palabras de incredulidad. Alguna gente comenzó a decir: “´Ammar ha caído en la incredulidad”. Sabiendo que eso era incorrecto, el Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, dijo: “De hecho, ´Ammar está lleno de Imán (Fe) desde su cabeza hasta sus pies. Su fe se ha mezclado con su carne y sus huesos”. Luego de que ´Ammar fue liberado por los incrédulos, fue donde el Profeta llorando. El Mensajero de Dios le preguntó: “¿En qué estado se encuentra tu corazón?” ´Ammar le respondió: “Está complacido con la fe”. Entonces el Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, le dijo: “Si vuelven (a perseguirte o torturarte), entonces hazlo nuevamente (di las palabras que te requieran)”.

(107) porque prefirieron la vida mundanal a la otra. Dios no guía al pueblo incrédulo.

(108) A ellos Dios les ha sellado sus corazones, sus oídos y sus ojos [con la incredulidad], y son indiferentes [ante los signos].

(109) No hay duda de que en la otra vida ellos serán los perdedores.

(110) Quienes emigraron luego de haber sido perseguidos, combatieron y fueron pacientes, tu Señor será Absolvedor y Misericordioso con ellos.

(111) Ese día toda alma argumentará para alcanzar la salvación y será juzgada acorde a sus obras; nadie será tratado injustamente.

(112) Dios les expone el ejemplo de una ciudad [La Meca], cuyos habitantes se sentían seguros y tranquilos, les llegaba abundante sustento proveniente de todas las regiones. Pero no agradecieron los favores de Dios, entonces Él los hizo padecer hambre y temor por cuanto habían cometido.

(113) El Mensajero que se les presentó era uno de ellos, pero lo desmintieron y el castigo los sorprendió por las injusticias que cometían.

(114) Coman de lo lícito y bueno que Dios les ha sustentado. Agradezcan las bendiciones de Dios, si es que solo a Él adoran.

(115) Se les ha prohibido [alimentarse de] la carne del animal muerto por causa natural, la sangre, la carne de cerdo, la del animal que haya sido sacrificado invocando otro nombre que no sea el de Dios. Pero si alguien se ve forzado [a ingerirlos por hambre extrema], sin intención de pecar ni excederse, no cometerá pecado. Dios es Absolvedor, Indulgente.

(116) No profieran mentiras dejando que sus lenguas determinen [a su antojo] diciendo: «Esto es lícito y aquello es ilícito», inventando mentiras acerca de Dios. Quienes inventen mentiras acerca de Dios no prosperarán jamás.

(117) Ellos tendrán un goce transitorio, pero luego [el Día del Juicio] recibirán un castigo doloroso.

(118) A los judíos les prohibí lo que te he narrado anteriormente. No fui injusto con ellos sino que ellos lo fueron consigo mismos.

(119) Con quienes hayan cometido un mal por ignorancia y luego se arrepientan y enmienden, tu Señor será Absolvedor, Misericordioso.

(120) Abraham fue un guía ejemplar, era obediente a Dios, monoteísta, y jamás fue idólatra.

(121) Era agradecido por los favores de Dios. Él lo eligió y lo guió por el sendero recto.

(122) Le concedí en la vida mundanal todo lo bueno, y en la otra vida estará con los justos.

(123) A ti [¡oh, Mujámmad!] te he inspirado: «Sigue la religión pura monoteísta de Abraham, que jamás fue de los idólatras».

(124) Les fue ordenado [a los judíos] dedicar el día sábado a la adoración cuando discreparon [y no aceptaron que este día fuera el viernes]. Tu Señor juzgará entre ellos el Día de la Resurrección sobre lo que discrepaban.

(125) Convoca al sendero de tu Señor con sabiduría y bellas palabras. Argumenta de la mejor manera. Tu Señor sabe bien quién se extravía de Su camino y quién sigue la guía.

(126) Si los agreden, respondan del mismo modo que se los ha agredido [y no se excedan]. Pero si son pacientes [y perdonan] será lo mejor para ustedes.

(127) Sé paciente y sabe que la paciencia es una virtud que Dios concede a quien quiere. No sientas pena [por la incredulidad de tu pueblo] ni te angusties por lo que traman.

(128) Dios está con los piadosos y con los que hacen el bien.

Corán

(1) Álif. Lam. Ra’. Éstos son los versículos del Libro, una recitación clara.

(2) Llegará el momento en que quienes se negaron a creer desearán haber sido musulmanes entregados a la voluntad de Dios.

(3) Déjalos que coman, que disfruten y sean seducidos por el apego a esta vida mundanal, que ya sabrán.

(4) No he destruido una ciudad [que estuviera condenada] hasta que le llegara su término prefijado.

(5) Ninguna nación puede adelantar ni retrasar su final.

(6) Y dicen: «¡Oh, tú [Mujámmad]! A quien se le ha descendido la revelación, eres un demente.

(7) ¿Por qué no te presentas acompañado por los ángeles, si es verdad lo que dices?»

(8) Pero cuando envío a los ángeles es con el castigo, y si los hubiera enviado [en respuesta a sus desafíos] ya no les quedaría tiempo.

(9) Yo he revelado el Corán y Yo soy su custodio.

(10) Envié antes de ti [otros Mensajeros] a los pueblos antiguos,

(11) pero cada vez que se les presentaba un Mensajero se burlaban de él.

(12) Así es como [la burla] se adueña del corazón de los pecadores.

(13) No creerán en él a pesar del ejemplo de lo que les aconteció a los pueblos anteriores.
No creerán en él: El Sagrado Corán.

(14) Y aunque les abriera una puerta en el cielo por la que pudieran ascender [y contemplar a los ángeles] no creerían.

(15) Dirían: «Nuestros ojos ven visiones, nos han hechizado».

(16) He dispuesto constelaciones en el cielo, y las he embellecido para quienes las contemplan.

(17) He protegido al cielo de todo demonio maldito.
Que pretenda escuchar las órdenes de Dios a los ángeles, para luego transmitírselas a sus aliados, los hechiceros y los hechiceros, los adivinos y los seudo-lectores de la suerte.

(18) Si intenta escuchar, le arrojaré una bola de fuego visible.

(19) He extendido la Tierra, he dispuesto en ella montañas firmes y he hecho crecer en ella de todo en forma equilibrada.

(20) Facilité los medios para que puedan vivir en ella ustedes y el resto de las criaturas.

(21) En Mi poder están las reservas de su sustento y les proveo de él en la medida que he determinado.

(22) Envié los vientos fecundadores y hago descender del cielo agua con la que les doy de beber, y no son ustedes los dueños de sus reservas.

(23) Yo doy la vida y doy la muerte, y Yo soy el heredero [a quien todo lo creado ha de retornar].

(24) Conozco a quienes los precedieron y también a quienes los sucederán.

(25) Tu Señor los congregará. Él es Sabio, lo sabe todo.

(26) He creado al ser humano de arcilla, un barro maleable.
Existen numerosas referencias en el Corán a que el ser humano ha sido “creado de arcilla (tin طِين )” o “de tierra (turab تُراب )”, y ambos términos apuntan al humilde origen biológico del ser humano, así como al hecho de que su cuerpo está compuesto de diversas substancias orgánicas e inorgánicas que existen, en otras combinaciones o en sus formas elementales, sobre la tierra o en su interior. El término salsal صَلصَال , que aparece en tres versículos de este capítulo y también en 55:14, añade una nueva dimensión a este concepto. Según la mayoría de los expertos en filología árabe, denota “arcilla seca que produce sonido” (al ser golpeada); y dado que se emplea en el Corán exclusivamente con referencia a la creación del ser humano, parece contener una alusión a su capacidad para el “lenguaje articulado”. Mientras que hama’ حَماء es un “barro” mezcla de tierra y agua, que son otros dos componentes que se mencionan en el Corán relacionados a la creación del ser humano, a lo que se suma el adjetivo masnún مَسْنُون que significa “moldeado” o “maleable”.

(27) Y al yinn lo había creado ya antes de fuego.
antes: Antes que al ser humano.

(28) [Recuerda] cuando tu Señor dijo a los ángeles: «Voy a crear un ser humano de arcilla, de barro maleable.

(29) Cuando lo haya completado e insuflado en él el espíritu que he creado para él, hagan una reverencia [en honor a Mí] ante él».

(30) Todos los ángeles hicieron la reverencia,

(31) excepto Iblís, que se negó a ser de quienes hicieron la reverencia.

(32) Dijo [Dios]: «¡Oh, Iblís! ¿Por qué no te cuentas entre quienes hicieron la reverencia?»

(33) Dijo: «No he de hacerla ante un ser humano [que es inferior a mí], al que has creado de arcilla, de barro maleable».

(34) Dijo [Dios]: «Sal de aquí, pues te maldigo.
Sal de aquí: Es decir, del lugar honorable que Dios le había concedido en el Paraíso.

(35) Serás maldito hasta el Día del Juicio».

(36) Dijo: «¡Oh, Señor mío! Tolérame hasta el Día de la Resurrección».

(37) Dijo: «Te concedo la prórroga que me pides,
Porque Dios había decretado probar a los seres humanos a través de su seducción. Ver Corán 7:14, 17:62 y 38:70.

(38) hasta el día cuyo término está definido».
El Día de la Resurrección, entonces será enviado al Infierno, donde sufrirá el castigo eterno.

(39) Dijo: «¡Oh, Señor mío! Por haber dejado que me extravíe, los seduciré y descarriaré a todos,

(40) excepto a quienes de Tus siervos hayas protegido».

(41) Dijo [Dios]: «A quien siga Mi camino recto lo protegeré.

(42) No tendrás poder alguno sobre Mis siervos, salvo los que se extravíen siguiéndote».

(43) El Infierno es el lugar donde se reunirán todos ellos.
se reunirán todos ellos: El demonio y sus seguidores.

(44) El Infierno posee siete puertas y cada una está destinada para un grupo determinado [de pecadores].

(45) Mientras que los piadosos serán retribuidos con jardines y manantiales.

(46) [Se les dirá:] Ingresen a ellos en paz, y estén seguros de que no se les privará de nada.

(47) Purificaremos sus corazones de todo rencor. Serán todos como hermanos y se sentarán unos enfrente de otros.

(48) Allí no volverán a sufrir, y vivirán por toda la eternidad.

(49) Anúnciales a Mis siervos [oh, Mujámmad] que soy el Absolvedor, el Misericordioso,

(50) y que Mi castigo es el verdadero castigo doloroso.

(51) Relátales sobre los huéspedes de Abraham.
los huéspedes de Abraham: Los ángeles que se presentaron en forma humana.

(52) Cuando se presentaron ante él, dijeron: «¡La paz sea contigo!» [Abraham y su esposa, luego de haberles ofrecido comida y observar que no comían, dijeron]: «Ustedes nos infunden temor».

(53) Le dijeron: «No temas, te anunciamos el nacimiento de un hijo sabio».

(54) Dijo: «¿Me dan ahora la albricia [de un hijo] siendo que me ha alcanzado la vejez?»

(55) Dijeron: «Te albriciamos con la verdad. No seas de quienes han perdido la esperanza».

(56) Dijo: «Solo desesperan de la misericordia de su Señor los extraviados».

(57) Preguntó: «¿Cuál es su misión? ¡Oh, emisarios [de Dios]!»

(58) Dijeron: «Hemos sido enviados [para castigar] a un pueblo de pecadores,

(59) salvo a la familia de Lot, a quienes salvaremos,

(60) pero no a su mujer, a quien Dios decretó que fuese de los condenados».

(61) Los emisarios se presentaron ante la casa de Lot.

(62) Dijo [Lot]: «Me son desconocidos».

(63) Dijeron: «Hemos sido enviados para ejecutar el castigo del cual tu pueblo dudaba.

(64) Venimos a ti con la Verdad. Siempre decimos la verdad.

(65) Sal por la noche con tu familia [y tus seguidores]. Marcha detrás de ellos [para protegerlos] y que ninguno de ustedes mire hacia atrás. Diríjanse hacia donde se les ha ordenado».

(66) Entonces le revelé [a Lot Mi decreto]: «Todos ellos [los pecadores] serán destruidos al amanecer».

(67) Pero se presentaron los habitantes de la ciudad contentos.
Se presentaron ante Lot al saber de sus huéspedes, con la intención de cometer con ellos la obscenidad que tenían por costumbre.

(68) Les dijo [Lot]: «Ellos son mis huéspedes. No me avergüencen.

(69) Tengan temor de Dios y no me humillen».

(70) Dijeron: «¿No te habíamos prohibido que protegieras gente [en tu casa de nuestras perversiones]?»

(71) Les respondió: «Cásense con las mujeres del pueblo si quieren».
Lot les mostró la forma de encaminar su deseo sexual, que es para un hombre, contrayendo matrimonio con una mujer.

(72) [Dice Dios:] ¡Juro por tu vida! [¡oh, Mujámmad!], que la aberración embriagaba sus mentes.

(73) Les sorprendió el castigo al amanecer.

(74) Puse al pueblo de cabeza y les envié una lluvia de piedras de arcilla.

(75) En eso hay signos para quienes reflexionan.

(76) [Esta ciudad arrasada] está aún en una ruta [a la vista de los viajeros].

(77) En eso hay un signo para los creyentes.

(78) Los habitantes del pueblo de Jetró cometían injusticias,

(79) por lo que los castigué. Ambas [ciudades, la de Lot y la de Jetró] son visibles desde una ruta.

(80) Los habitantes de Al Hiyr desmintieron a los Mensajeros.
Los habitantes de Al Hiyr: Es el pueblo de Zamud. Ver Corán 7:73-79.

(81) Les presenté Mis signos, pero los rechazaron.

(82) Construían sus casas esculpiendo las montañas y allí se sentían seguros.

(83) Pero los sorprendió el castigo al amanecer,

(84) y no los benefició en nada la riqueza que poseían.

(85) No he creado los cielos, la Tierra y cuanto hay entre ambos sino con un fin justo y verdadero. La Hora se aproxima, así que tú disculpa [a los que niegan el Mensaje] y trátalos de buena manera.
La Hora: Al Qurtubi dijo: “La Hora es una palabra en árabe que se usa para designar un periodo de tiempo limitado; la costumbre hizo que se aplique a una parte de las veinticuatro partes (horas) del día y la noche, que son la base de la temporalidad. Se la denomina así porque hace referencia al presente; y se denomina así al Día de la Resurrección en referencia a su inminencia, pues todo lo que nos sobrevendrá está cerca. También se dijo que se le denomina La Hora por que llega súbitamente, en un instante”.

(86) Tu Señor es el Creador, el que todo lo sabe.

(87) Te he distinguido con la revelación de los siete versículos que se reiteran como parte del grandioso Corán.
siete versículos que se reiteran: Referencia al capítulo Al Fátihah, el primero del Corán, que se repite en cada una de las cinco oraciones diarias.

(88) No codicies aquello conque he agraciado a algunos de los ricos [de los que desmienten el Mensaje] y no sientas pena por ellos [a causa de su incredulidad]. Y baja tu ala protegiendo a los creyentes.

(89) Di: «He sido enviado para advertirles claramente [sobre un castigo]»,

(90) como el que le envié a los que rechazaron [el Mensaje de Dios].

(91) Como los que creen en una parte del Corán y en otra no.

(92) ¡Por tu Señor! Que haré rendir cuentas a todos ellos

(93) por todo lo que hicieron.

(94) Divulga lo que se te ordena [públicamente] y no te preocupes por los idólatras.

(95) Yo te protegeré de quienes se burlen,

(96) de quienes ponen junto a Dios otras deidades, ellos ya pronto sabrán [el castigo que les espera].

(97) Sé que te apenas por cuanto dicen,

(98) pero glorifica con alabanzas a tu Señor y cuéntate entre quienes se prosternan [en oración para aliviar su angustia],

(99) y adora a tu Señor hasta que te llegue la certeza.
la certeza: El término “la certeza” (Al iaqin اليَقِين ) se usa en el Corán para denominar a la muerte.

Corán

(1) Álif. Lam. Ra’. Éste es el Libro que te he revelado para que saques a la gente de las tinieblas a la luz con el permiso de tu Señor, y los guíes hacia el sendero de Dios, el Poderoso, el Loable.

(2) A Dios pertenece cuanto existe en los cielos y en la Tierra. ¡Ya verán los que se niegan a creer, el castigo terrible que les aguarda!
En esta vida y en el Día del Juicio Final.

(3) Los que prefieren la vida mundanal a la próxima y desvían a la gente del camino de Dios, haciéndolo parecer tortuoso. Ellos son los que están en un extravío profundo.

(4) Todos los Mensajeros que envié hablaban el lenguaje de su pueblo para así transmitirles claramente el Mensaje. Pero Dios extravía a quien quiere y guía a quien quiere; Él es el Poderoso, el Sabio.

(5) Envié a Moisés con Mis signos [al Faraón y su pueblo, y le dije:] «Saca a tu pueblo de las tinieblas a la luz, y recuérdales las bendiciones que Dios les concedió». En ello hay signos para quien es perseverante y agradecido.

(6) Moisés le dijo a su pueblo: «Recuerden las bendiciones de Dios para con ustedes cuando los salvó de las huestes del Faraón, quienes los sometían a castigos crueles, degollaban a sus hijos varones y dejaban con vida a sus hijas mujeres. Eso era una dura prueba de su Señor para ustedes».

(7) Y cuando su Señor anunció: «Si Le agradecen, Él incrementará su sustento; y sepan que si lo rechazan, Su castigo será severo».

(8) Dijo Moisés: «Si ustedes y todos los que habitan en la Tierra no creen, sepan que Él no necesita de Sus criaturas, y es digno de alabanza».

(9) ¿Acaso no les fue relatado lo que les aconteció a sus predecesores, al pueblo de Noé, ‘Ad, Zamud, y a todos aquellos que les sucedieron y que solo Dios conoce? Cuando sus Mensajeros se presentaron ante ellos con pruebas claras [de la verdad, los que se negaron a creer] se mordieron los dedos del odio [que sentían por ellos] y les dijeron: «Nosotros no creemos en el Mensaje que han traído, y tenemos una duda profunda sobre aquello a lo que nos convocan».

(10) Sus Mensajeros les respondieron: «¿Acaso tienen dudas acerca de Dios, Creador de los cielos y de la Tierra? Él los convoca [a que Lo adoren] para que así les sean perdonados sus pecados y se les permita vivir hasta el plazo que se les ha prefijado». Dijeron: «Son seres humanos igual que nosotros y solo quieren apartarnos de lo que adoraron nuestros padres; presenten una evidencia clara [de que son Mensajeros de Dios]».

(11) Sus Mensajeros les dijeron: «Solo somos seres humanos como ustedes, pero Dios agracia [con la profecía] a quien quiere de Sus siervos. No nos es posible presentar un milagro excepto con el permiso de Dios. ¡Los creyentes deben encomendarse a Dios!

(12) Nosotros nos encomendamos a Dios, pues Él nos ha guiado por Su camino, y seremos pacientes ante sus hostilidades. A Dios se encomiendan quienes en Él confían».

(13) Los que se negaron a creer dijeron a sus Mensajeros: «Si no vuelven a nuestra religión los expulsaremos de nuestra tierra», pero Su Señor les reveló: «Exterminaré a los opresores,

(14) los haré habitar la tierra después de ellos. Eso será para quienes teman [el día de] la comparecencia ante Mí y teman Mi advertencia».

(15) Entonces [los Mensajeros] pidieron el socorro de Dios, y todo prepotente y obstinado fue destruido,

(16) [tras el Día del Juicio] será castigado en el Infierno, donde se le dará de beber un agua de pus
agua de pus: Las secreciones de las heridas de quienes son atormentados en el Infierno.

(17) que beberá a sorbos, y apenas podrá tragarla. La muerte lo acechará por todos lados pero no morirá; recibirá un castigo terrible.

(18) El ejemplo de las obras de quienes no creyeron en su Señor será como el de las cenizas expuestas al viento en un día tempestuoso: [El Día del Juicio] no encontrarán recompensa alguna por sus actos. Ésa será la ruina total.

(19) ¿Acaso no ves [¡oh, Mujámmad!] que Dios creó los cielos y la Tierra con un fin justo y verdadero? Si quisiera los haría desaparecer y los reemplazaría por otros.

(20) Eso no es difícil para Dios.

(21) [El Día de la Resurrección] saldrán de sus tumbas para comparecer ante Dios, y los más débiles dirán a los soberbios [líderes de la incredulidad]: «Nosotros fuimos sus seguidores [en la vida mundanal]. ¿Nos librarán ahora del castigo de Dios?» Dirán: «Si Dios nos hubiera guiado los habríamos conducido por el camino recto. Lo mismo da que nos desesperemos o que tengamos paciencia; hoy no podremos escapar del castigo».
los habríamos conducido por el camino recto: Esta respuesta evidencia cómo son incapaces de asumir su culpabilidad, y justifican su incredulidad argumentando que Dios no los guió. Esto evidencia que no es correcto excusarse en el Designio Divino para justificar las malas elecciones propias.

(22) Cuando todos hayan sido sentenciados, el demonio dirá: «La promesa que Dios les hizo era verdadera, en cambio yo les hice promesas que no cumplí. Yo solo tenía poder para seducirlos mediante susurros, pero fueron ustedes quienes me siguieron. No me culpen ahora, sino que repróchense a ustedes mismos. Yo no puedo socorrerlos en nada ni tampoco ustedes a mí, y hoy me desentiendo de que me hayan asociado [a Dios]». Los opresores recibirán un castigo doloroso.
En la teología islámica, el demonio es una criatura más de Dios que será juzgado y castigado en el Infierno; y a diferencia de la teología cristiana el demonio no está a cargo del Infierno ni es su reino.

(23) En cambio, quienes hayan creído y obrado correctamente serán introducidos en jardines por donde corren ríos y donde morarán por toda la eternidad, con el permiso de Dios. El saludo allí será: ¡Salam [paz]!

(24) ¿Por qué no observas el siguiente ejemplo que te propone Dios?: Una palabra buena es como un árbol bondadoso cuya raíz está firme y sus ramas se extienden hacia el cielo,
palabra buena: “Palabra buena” alude al testimonio del monoteísmo: nada ni nadie merece ser adorado salvo Dios.

(25) y da frutos en toda época [del año] con el permiso de su Señor. Así es como Dios expone ejemplos para que la gente reflexione.

(26) En cambio, una palabra maligna es como un árbol dañino que ha sido arrancado de la tierra y no tiene dónde afirmarse.
palabra maligna:“Palabra maligna” alude al testimonio de la idolatría, afirmando que otros distintos a Dios son dioses o merecen ser adorados.

(27) Dios afianza a los creyentes con la palabra firme en esta vida y en la otra, y extravía a los que cometen injusticias. Dios hace lo que quiere.
palabra firme: “Palabra firme” alude al testimonio de fe, ya que Dios fortalece a los creyentes para que lo comprendan, lo pronuncien y vivan según sus principios en esta vida; y los fortalece en el momento de la muerte para que lo puedan pronunciar y sean sus últimas palabras al abandonar este mundo, así como su respuesta correcta ante los ángeles que lo interrogarán sobre quién es su Señor.

(28) ¿Acaso no reparas en aquellos que en vez de agradecer a Dios por Sus bendiciones son ingratos y conducen a su pueblo a la perdición?

(29) Serán ingresados al Infierno. ¡Qué pésima morada!

(30) Porque Le atribuyeron a Dios iguales para desviar [a la gente] de Su camino. Diles [a ellos]: «Disfruten [en esta vida lo que puedan], porque su destino será el Infierno».

(31) Diles a Mis siervos creyentes que cumplan con las oraciones prescritas y den en caridad parte de lo que les he proveído, tanto en privado como en público, antes de que llegue el día en el cual no habrá comercio ni amistad [que pueda alterar el juicio].

(32) Dios es Quien creó los cielos y la Tierra e hizo descender la lluvia del cielo con la que hace brotar los frutos para sustento de ustedes. Él es Quien puso a su servicio los barcos para que, con Su permiso, surquen el mar, y también puso a su servicio los ríos.

(33) [También] puso al servicio de ustedes el Sol y la Luna, que siguen su curso incesantemente, y también puso a su servicio la noche y el día.

(34) Él les ha dado todo cuanto Le han pedido. Si intentaran contar las bendiciones de Dios no podrían enumerarlas. El ser humano es injusto y desagradecido.

(35) Y [recuerda, ¡oh, Mujámmad!] cuando Abraham dijo: «¡Oh, Señor mío! Haz que esta ciudad sea un lugar seguro, y protégeme junto a mi descendencia de caer en la adoración de ídolos.
esta ciudad: La ciudad de La Meca. ídolos: Ídolo (sanam صَنَمْ ) es lo que está representado en una imagen; mientras que una deidad (uazan وَثَن ) puede ser cualquier cosa que sea adorada. Dijo el sabio Ibrahim At-Taimi: “¿Y quién podría sentirse seguro de la idolatría, si el Profeta Abraham no se sentía a salvo de ella?”

(36) ¡Oh, Señor mío! La adoración a los ídolos ha extraviado a muchas personas. Todo aquel que me siga [en la fe monoteísta] será de los míos, pero quien me desobedezca [rechazando el Mensaje]… Tú eres Absolvedor, Misericordioso.
La adoración a los ídolos : El culto idolátrico a estatuas e ídolos ha estado presente tanto en tiempos pasados como en nuestros días. Los politeístas adoran a estas representaciones al pedirles por sus necesidades. Les suplican en momentos de dificultad y momentos de aflicción ofreciéndoles promesas y votos.

(37) ¡Oh, Señor nuestro! He establecido parte de mi descendencia en un valle árido de poca vegetación junto a Tu Casa Sagrada, para que, ¡oh, Señor nuestro!, cumplan con la oración. Infunde en los corazones de la gente amor por mi descendencia, y provéelos de todo alimento para que sean agradecidos.
Tu Casa Sagrada: En La Meca.

(38) ¡Oh, Señor nuestro! Tú bien sabes lo que ocultamos y lo que manifestamos, y no hay nada en la Tierra ni en el cielo que pueda esconderse de Dios.

(39) ¡Alabado sea Dios!, Quien me agració en la vejez con [mis hijos] Ismael e Isaac. Mi Señor escucha bien las súplicas de quienes Lo invocan.

(40) ¡Oh, Señor mío! Haz que tanto mis descendientes como yo seamos fervientes practicantes de la oración. ¡Oh, Señor nuestro! Concédeme esta súplica.

(41) ¡Oh, Señor nuestro! Perdóname, así como a mis padres y a todos los creyentes el Día que se celebre el Juicio [Final]».

(42) No pienses [¡oh, Mujámmad!] que Dios está distraído de lo que hacen los opresores. Él solo está tolerándolos hasta que llegue el día en el que sus miradas quedarán paralizadas.
lo que hacen los opresores: No es que el Mensajero de Dios, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, pensara que Dios estaba distraído de lo que hacían los pecadores, sino que es una ironía para que escuchen aquellos que niegan la fe y sepan que, aunque no sean castigados en esta vida, llegará el día en que abandonarán este mundo y tendrán que enfrentarse con Dios y rendir cuentas por sus malas acciones e incredulidad. quedarán paralizadas: El Día del Juicio Final será un día terrible; sus miradas estarán fijas y estáticas, porque el horror se habrá apoderado de ellos, no parpadearán ni se moverán del susto.

(43) Ese día saldrán apresurados de sus tumbas con las cabezas erguidas, no podrán parpadear ni tampoco pensar [presas del terror].

(44) Advierte a la gente [¡oh, Mujámmad!] sobre el día en que los azote el castigo, y los que cometían injusticias digan: «¡Oh, Señor nuestro! Toléranos un tiempo más [y retórnanos a la vida mundanal] para que respondamos a Tu llamado y sigamos a los Mensajeros». [Pero se les responderá:] «¿Acaso no habían jurado antes que no serían resucitados?»

(45) Habitaron en los mismos territorios en que vivieron quienes [no creyeron y] fueron injustos consigo mismos [rechazando el Mensaje], y no creyeron a pesar de que se enteraron de cómo los aniquilé y de que les expuse muchos ejemplos para que reflexionaran.

(46) Se confabularon [contra ti], pero Dios desbarató sus planes, a pesar de que sus confabulaciones podrían haber derrumbado montañas.

(47) No pienses [¡oh, Mujámmad!] que Dios no cumplirá con la promesa que les hizo a Sus Mensajeros; Dios es Poderoso, Dueño de la retribución.
Porque indefectiblemente ha de castigar con severidad a quienes se nieguen a creer en Él y desmientan a Sus Profetas.

(48) El día en que la Tierra sea cambiada por otra y los cielos [por otros cielos], todos se presentarán ante Dios, el Único, el Victorioso.

(49) Verás a los criminales encadenados.

(50) Sus vestimentas serán de alquitrán y sus rostros serán abrasados por el fuego.

(51) Dios retribuirá a cada ser según sus obras; Dios es rápido en ajustar cuentas.

(52) Éste [Corán] es un Mensaje para toda la humanidad, para advertirles [sobre el castigo] y para que sepan que Dios es uno. Que los dotados de intelecto reflexionen [en su contenido].

Corán

(1) Álif. Lam. Ra’. Éstos son los versículos del Libro que te fue revelado [¡oh, Mujámmad!] por tu Señor, aunque la mayoría de la gente no crea.
del Libro: El Corán.

(2) Dios es Quien elevó los cielos sin columnas que pudieran ver, luego se estableció sobre el Trono; sometió al Sol y a la Luna haciendo que cada uno recorriera [su órbita] por un plazo prefijado; Él decreta todos los asuntos y explica detalladamente Sus signos para que tengan certeza de que ante Él comparecerán.

(3) Él fue quien extendió la tierra, dispuso en ella montañas firmes y ríos, a los frutos los creó en pares, [Dios] hace que la noche suceda al día. En esto hay señales para quienes recapacitan.

(4) En la tierra hay regiones colindantes cuyos terrenos son variados, en ellos hay huertos de vides, cultivos de cereales, palmeras de un solo tronco o de varios; todo es regado por una misma agua. Algunas dispuso que tuvieran mejor sabor que otras, en esto hay signos [de Dios] para quienes reflexionan.

(5) Si te asombras [de estos signos], más asombroso aún es que digan [los incrédulos]: «¿Acaso cuando seamos reducidos a polvo seremos resucitados?» Ellos no creyeron en su Señor, serán arriados con argollas en sus cuellos [al castigo] y serán los moradores del Infierno, donde sufrirán por toda la eternidad.

(6) Te desafían a que les adelantes el castigo en vez de pedirte ser agraciados por la misericordia divina, siendo que antes de ellos otros pueblos semejantes [en su incredulidad] fueron castigados. Es tu Señor Quien perdona a la gente a pesar de sus injusticias, pero también es severo en el castigo.

(7) Dicen los que se niegan a creer: «¿Por qué no desciende con él un milagro de su Señor?» [Respóndeles, ¡oh, Mujámmad!,] que tú solo eres un amonestador y que para cada pueblo he enviado un [Profeta como] guía.
“¿Por qué no desciende con él un milagro de su Señor?”: Que pruebe que dice la verdad.

(8) Dios bien sabe qué se gesta en el vientre de cada hembra, y si completará el ciclo de gestación o no. Él asignó a todas las cosas un tiempo establecido.

(9) Él conoce lo oculto y lo manifiesto, es el Grande, el Sublime.
Él conoce lo que los sentidos no alcanzan, y todo lo que Sus criaturas logran percibir.

(10) [Ante Dios] es igual que digan algo en secreto o en público, que se oculten de noche o se muestren de día.

(11) El [ser humano] tiene [ángeles] guardianes por delante y por detrás, que lo protegen por orden de Dios. Sepan que Dios no cambia la condición de un pueblo hasta que ellos no cambien lo que hay en sí mismos. Pero si Dios decreta el castigo para un pueblo, no existe nada que lo pueda impedir, y no encontrarán fuera de Él protector alguno.
no cambien lo que hay en sí mismos:Es decir, si no estás dispuesto a cambiar por Dios, no esperes que Dios cambie tu situación.

(12) Él es Quien los hace ver el relámpago con temor [a su peligro] y anhelo [de las lluvias], Él es quien forma las nubes pesadas.
Estos dos versículos muestran una correlación entre la formación de nubes cargadas de lluvia o de granizo y la producción del rayo: la primera es motivo de ansias por el beneficio que representa; la segunda, motivo de temor, ya que su caída podría generar algún perjuicio. La estrecha relación entre ambos fenómenos fue demostrada por la existencia de la electricidad atmosférica. El término “pesadas” alude a un milagro científico, ya que una nube cumulonimbus puede llegar a cargar hasta 30.000 toneladas de agua.

(13) El trueno Lo glorifica con su alabanza, así como los ángeles por temor a Él. [Dios] envía los rayos y fulmina con ellos a quien quiere, sin embargo [los que se niegan a creer todavía] discuten acerca de Dios. Él es severo en el castigo.

(14) Solo Él tiene el verdadero derecho a ser invocado, y aquellos [ídolos] que invocan en lugar de Dios no podrán responder sus súplicas. [Su ejemplo] es como quien extiende sus manos [frente a un pozo profundo de agua] creyendo que ésta vendrá a su boca, pero esto es imposible. Las súplicas [a los ídolos] de los que se niegan a creer son en vano.
derecho a ser invocado: La súplica es la expresión misma de la adoración. Por eso dijo el Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él: “La súplica es la adoración por excelencia”.

(15) Ante Dios se prosternan quienes están en los cielos y en la Tierra de buen o mal grado, tal como lo hacen sus sombras, por la mañana y por la tarde.

(16) Pregúntales [¡oh, Mujámmad! a los idólatras]: «¿Quién es el Señor de los cielos y de la Tierra?» Y diles: «Él es Dios». Pregúntales: «¿Es que toman en vez de Él [ídolos como] protectores que no pueden beneficiarse ni perjudicarse ni siquiera a sí mismos?» Y también: «¿Acaso se pueden equiparar el ciego y el vidente? ¿O las tinieblas y la luz? ¿O es que aquello que Le asocian a Dios ha creado algo como lo hace Dios, por lo que se confundieron y creyeron que debían adorarlo?» Diles: «Dios es Quien ha creado todas las cosas. Él es el Único, el que tiene dominio absoluto sobre todas las cosas».

(17) [Dios] envía el agua del cielo, que corre por los valles acorde a la capacidad de los mismos, y en su torrente acarrea espuma en su superficie, igual que la espuma que sale de la fundición para fabricar las alhajas o los utensilios. Con ello Dios les expone un ejemplo para que sepan diferenciar la verdad de lo falso: en cuanto a la espuma, se desvanece rápidamente, y aquello que beneficia a la gente permanece en la tierra [enriqueciéndola]; así es como Dios les expone los ejemplos.
Dios les expone los ejemplos: Dice el Sheij Al Islam Ibn Taimiah, que Dios sea misericordioso con él: “Dios asemeja al conocimiento con el agua que Él envía del cielo, porque a través de él se vivifica el corazón, al igual que el agua vivifica al cuerpo. Y asemeja a los corazones con los valles debido a que ellos son lugares donde se establece el conocimiento, como los valles conservan el agua. Existen corazones que atesoran mucho conocimiento y valles en los que se acumula el agua en abundancia, también hay corazones que pueden alcanzar poco conocimiento y valles que pueden almacenar poca agua. Nos informa el Altísimo que en la superficie del agua de las crecientes flota la espuma, y que la espuma desaparece, en cambio lo que beneficia a las personas permanece en la tierra. De la misma manera, los corazones se entremezclan con las pasiones y las dudas, pero luego éstas finalmente desaparecen, permaneciendo la fe y el Corán, que es lo que realmente beneficia a la persona”.

(18) Quienes crean en su Señor obtendrán lo mejor, y quienes se nieguen a creer, sepan que aunque poseyeran todo cuanto existe en la Tierra, o el doble, y lo ofrecieran como rescate [para salvarse del tormento], recibirán un castigo terrible; su morada será el Infierno. ¡Qué pésima morada!

(19) ¿Acaso quien reconoce que lo que te reveló tu Señor es la Verdad es igual al ciego [de corazón que no quiere ver]? Solo recapacitan los dotados de intelecto,

(20) que cumplen con el compromiso que asumieron y no lo quebrantan,

(21) que no rompen los lazos familiares que Dios ordenó respetar, que tienen temor de su Señor y Su terrible castigo,

(22) que son perseverantes [en la adoración] anhelando el rostro de su Señor [y Su complacencia], que practican la oración prescrita, que hacen caridades con parte de lo que les he proveído, tanto en privado como en público, y si son maltratados responden con una buena actitud [sabiendo disculpar]; éstos obtendrán como recompensa una morada hermosa

(23) e ingresarán en los Jardines del Edén junto a quienes creyeron entre sus padres, cónyuges y descendientes. Luego, los ángeles ingresarán ante ellos por todas las puertas,

(24) y les dirán: «¡La paz sea sobre ustedes! Porque fueron perseverantes [en la adoración]. ¡Qué hermosa es la recompensa de la morada eterna!»

(25) Pero en cambio, quienes quebrantan el compromiso que asumieron con Dios, rompen los lazos familiares que Dios ordenó respetar y siembran la corrupción en la Tierra, serán maldecidos y merecerán la peor de las moradas.
la peor de las moradas: El Fuego del Infierno.

(26) Dios concede sustento abundante a quien quiere y se lo restringe a quien quiere. [Algunos] se regocijan con la vida mundanal, pero ¿qué es la vida mundanal comparada con la otra, sino un goce ilusorio?

(27) Dicen los que se niegan a creer: «¿Por qué no se le concede un milagro de su Señor [que así creeremos]?» Diles [¡oh, Mujámmad!]: «Dios extravía a quien quiere, y guía hacia Él a quien se arrepiente».

(28) Los corazones de los creyentes se sosiegan con el recuerdo de Dios. ¿Acaso no es con el recuerdo de Dios que se sosiegan los corazones?

(29) Quienes creen y obran rectamente serán los bienaventurados, tendrán un destino hermoso.

(30) Te he enviado a una comunidad que fue precedida por otras, para que les recites lo que te he revelado, pero ellos no creyeron en el Compasivo. Diles: «Él es mi Señor, no hay otra divinidad salvo Dios, a Él me encomiendo y confío, y a Él he de retornar».
el Compasivo: Este versículo fue revelado cuando los idólatras de Quraish negaron por soberbia el nombre “El Compasivo”, entonces Dios descendió el siguiente versículo: “Diles: “Ya sea que Lo invoquen diciendo: ¡Oh, Dios!, ¡oh, Compasivo!, o cualquier otro nombre con el que Le invoquen, Él los oirá. Sepan que Él posee los nombres [y atributos] más sublimes.” (17:110). “El Compasivo” es uno de los nombres de Dios, y a su vez un atributo que describe su divinidad y perfección. En consecuencia, los idólatras no solo negaron la existencia de tal nombre, sino que también negaron su implicancia, es decir, el atributo divino que implica tal nombre. Quienes niegan que los nombres de Dios impliquen atributos de su Ser, caen en el mismo error que esos idólatras.

(31) Si existiera un libro revelado que pudiera mover las montañas, abrir la tierra o hacer hablar a los muertos, ése sería el Corán. Pero todos los asuntos dependen del decreto de Dios. ¿Acaso no saben los creyentes que si Dios quisiera guiaría a todas las personas? Los que se niegan a creer seguirán padeciendo calamidades que azotarán a su territorio y a sus alrededores por su incredulidad, hasta que les llegue el castigo que Dios les ha advertido. Dios no quebranta Sus promesas.

(32) También se burlaron de los Mensajeros que vinieron antes de ti, pero los toleré por un tiempo [dándoles la oportunidad de enmendarse, y como no lo hicieron], luego los aniquilé. ¡Qué terrible fue Mi castigo!

(33) ¿Es, acaso, Quien tiene a cada uno de los seres vivos bajo Su tutela suprema, [tratando a cada uno de ellos] según lo que merece, [comparable a cualquier otra cosa existente]? Pero a pesar de eso asocian a Dios [en la adoración]. Diles: «¡Mencionen [a los socios de Dios] si es que existen! ¿Acaso creen que van a informarle de algo que existe en la Tierra y que Él no sepa, o solo hablan sin sentido?» [El demonio] los hizo ver, a los que se negaron a creer, la idolatría como algo bueno, y [por eso] apartan a la gente del camino recto. Pero aquel a quien Dios extravía, nadie lo podrá guiar.

(34) Ellos serán castigados en esta vida, pero el tormento que les aguarda en la otra será aún más severo, y no tendrán quién los proteja de Dios.

(35) La descripción del Paraíso que le fue prometido a los piadosos: En él correrán ríos, sus frutos no se agotarán jamás y su sombra será eterna. Esa será la recompensa de los temerosos de Dios, mientras que el castigo de los incrédulos será el Infierno.

(36) Aquellos a quienes concedí el Libro [el Corán] se regocijan con lo que te fue revelado [¡oh, Mujámmad!], pero entre los aliados hay quienes negaron algunas partes [del Corán]. Diles: «Me ha sido ordenado adorar a Dios y no asociarle nada [en la adoración]; a Él me encomiendo y ante Él compareceré».
los aliados: Distintas tribus de incrédulos que se aliaron para combatir al Islam y los musulmanes.

(37) Así te he revelado el Corán en [idioma] árabe. Pero si tú sigues sus pasiones después de haberte llegado el conocimiento, no tendrás, fuera de Dios, defensor ni protector alguno.
si tú sigues sus pasiones: Las opiniones de los que se negaron a creer, dando la espalda a la revelación.

(38) He enviado a otros Mensajeros antes de ti, y les concedí esposas e hijos. Ningún Mensajero podría presentar un milagro salvo con el permiso de Dios. Cada asunto está registrado en un Libro.

(39) Dios anula o confirma [de Su Designio] lo que quiere. Él tiene en Su poder el Libro donde están registradas todas las cosas [la Tabla Protegida].

(40) [¡Oh, Mujámmad!] Puede que te haga ver parte de lo que les tengo reservado [a los incrédulos como castigo], o que te haga morir antes de ello. Tú solo tienes el deber de transmitir el Mensaje, y ante Mí comparecerán.
te haga morir antes de ello: Pero ten la certeza de que el castigo les llegará tarde o temprano.

(41) ¿Acaso no vieron que Yo decreté que fueran perdiendo territorio a manos de los creyentes? Cuando Dios decide algo nadie lo puede impedir. Él es rápido en ajustar cuentas.

(42) En la antigüedad [los incrédulos] también se confabularon [contra los Mensajeros], pero Dios desbarató los planes de todos ellos. Él bien sabe lo que cada ser se propone realizar. Ya sabrán los que se niegan a creer quiénes merecerán la peor de las moradas.
la peor de las moradas: El Infierno.

(43) Dicen los que se niegan a creer: «Tú no eres un Mensajero». Diles [¡oh, Mujámmad!]: «Es suficiente Dios como testigo [de mi veracidad] entre ustedes y yo, y también [son testigos de ello] quienes tienen conocimiento sobre los Libros revelados anteriormente.
Libros revelados anteriormente: Otros Libros que fueron revelados por Dios, como el Evangelio y la Tora.

Corán