La criptomoneda tiene muchas monedas, ejemplos de las cuales incluyen pagar con Bitcoin o donar con Bitcoin, pagar con Ethereum o donar con Ethereum, que son las monedas más antiguas en este campo. En el mundo de las criptomonedas, existe un famoso y antiguo dicho que dice: «Aquí se acepta Bitcoin». Esta oración es importante porque expresa el concepto de aceptar moneda digital y no se limita a Bitcoin.
La criptomoneda ofrece varias ventajas únicas para pagos y donaciones, incluido el fácil acceso a diferentes países y la aceleración de la prestación de servicios a las personas necesitadas. Debido a que la criptomoneda está descentralizada y no está sujeta a regulaciones o restricciones gubernamentales, se puede enviar y recibir fácilmente a través de las fronteras, lo que la convierte en una opción conveniente para las personas y organizaciones que buscan realizar pagos o donaciones internacionales. Esto es particularmente importante para aquellos en países en desarrollo o áreas con acceso limitado a los servicios financieros tradicionales.
Además, la criptomoneda puede reducir la conversión fiduciaria de diferentes países, lo que puede reducir las tarifas de cambio asociadas con los métodos de pago tradicionales. Esto puede ahorrar dinero a individuos y organizaciones en tarifas de transacción y facilitar el envío y la recepción de pagos a través de las fronteras.
Otra ventaja de las criptomonedas es que les permite a las personas calcular fácilmente el pago total y la deuda islámica en todas las áreas de sus finanzas y su vida y nuevamente usar criptomonedas en lugar de dinero fiduciario. Debido a que las transacciones de criptomonedas se pueden rastrear en la cadena de bloques, los usuarios pueden realizar fácilmente un seguimiento de sus pagos y asegurarse de que están cumpliendo con sus obligaciones financieras. Esto es particularmente importante para quienes siguen los principios financieros islámicos, que prohíben cobrar o pagar intereses. Las transacciones de criptomonedas no implican intereses, lo que las convierte en una opción potencialmente viable para personas y organizaciones que siguen los principios financieros islámicos.